Treinta y ocho vecinos de Santiago Sacatepéquez fueron engañados y estafados con falsas promesas de trabajo y residencia en España, pero al final lo único que cosecharon de su viaje al país europeo fueron deudas y decepción.

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La falta de oportunidades económicas en Guatemala los hizo blanco fácil de estafadores y aprovechados que les vendieron el sueño europeo por €4 mil (Q40 mil), aunque en realidad lo único que les gestionaron fue una plaza en el avión que los llevaría hasta España hace tres meses (Q10 mil).

Los 11 vecinos de Santiago Sacatepéquez se reunieron en el aeropuerto el pasado 22 de marzo, ilusionados por la nueva aventura que iban a emprender, sin saber que eran falsas las promesas de trabajo, en el que cobrarían €1 mil 800 (Q18 mil) y el permiso de residencia tan pronto pisaran suelo español. Trajeados como si fuera el día más importante de su vida, emprendieron el trayecto, acompañados de dos de sus presuntos estafadores: Orlando Álvarez y Eddy Iovanny Morán.

Quince días después, tras haberse mudado de apartamento cuatro veces y sin rastro ni del empleo ni de la documentación prometida, Álvarez y Morán regresaron a Guatemala, abandonando a los migrantes en Barcelona, España.

“Tuvimos que dormir dos noches en la calle, porque no había ningún apartamento libre en el que pudiéramos quedarnos todos, menos mal que una iglesia evangélica se hizo cargo de nosotros y nos dio un techo”, contó Juan Esteban*, quien prefiere no dar su nombre real, ya que han sufrido amenazas.

Los 11 que emigraron pidieron un préstamo fiduciario a la Cooperativa Guadalupana por Q40 mil (€4 mil) para pagarle a su coyote, dinero que aún deben, ya que al no tener trabajo no han sido capaces de amortizar más que los intereses creados por el crédito.

“Yo decidí volver antes de que se cumplieran los tres meses de permiso que da el Gobierno español, porque cuanto más tiempo pasara allí, más intereses se me acumulaban. Siendo agricultor no tengo muchas oportunidades de ahorrar para pagarlo”, apuntó apesadumbrado.

El propio Orlando Álvarez les aconsejó solicitar los préstamos a la cooperativa, depositarlos después en la cuenta de la Asociación de Desarrollo Alternativo de Santiago Sacatepéquez (ADSS), de la que la mayoría formaban parte, para finalmente transferírselo a él a través de cheques.

Juan Puac, presidente de ADSS, aseguró: “Todo el dinero fue entregado a Álvarez en cheques después del viaje; yo no me quedé con nada, porque no somos una organización con fines lucrativos”.

Álvarez se aprovechó de la confianza y el respeto que le tenían los campesinos, pero actualmente no ha respondido a ninguna de sus llamadas.

“Cómo íbamos a saber que era un estafador, si nos enseñó fotos suyas con el presidente Berger y con Bush; nosotros convocamos a los socios para darles la oportunidad de tener un mejor futuro, y al final todos fuimos engañados”, sentenció Puac, que también ha sido denunciado por algunos de los afectados debido a que él recibió el dinero del pago en primera instancia.

Entre las 11 personas que viajaron a España en el primer grupo se encontraban Edwin Con Pec y Santos Batzin, hijo y yerno de Esteban Con, quien tuvo que vender su terreno para poder pagar la cuota que solicitaron los estafadores.

“Yo vendí mi terreno, el que durante 10 años había guardado para heredarles a mis hijos, con la ilusión de que Edwin iba a tener más oportunidades en España, por eso ahora he puesto una demanda en el Ministerio Público, para que me devuelvan mi dinero”, afirmó.

Su hijo Edwin volvió hace un mes, luego de haber trabajado 15 días cuidando a un anciano enfermo. “Por más que buscó empleo allá, como no tenía permiso de trabajo, no le dieron nada”, lamentó su padre.

Su yerno aún continúa en España junto a 16 guatemaltecos más que aún no han perdido la esperanza de encontrar trabajo por sus propios medios, pero la visa de turista se les venció el pasado 4 de julio. Asociaciones españolas de apoyo a los emigrantes les están ayudando para tramitar sus papeles, pero aún no han tenido respuesta.

José Tolimán, que aún continúa en España, contó vía telefónica que se encuentran bien y que la gente de extranjería se ha convertido en sus mejores amigos. “Yo quiero advertir a mis compatriotas que todos fuimos engañados por Álvarez y Morán, y que hay redes que sólo reciben el dinero y dejan a la gente abandonada en el aeropuerto”, afirmó.

El segundo grupo de 27 personas viajó a España el 4 de abril, pero su ida fue gestionada por Gustavo Adolfo Hernández y Francisco Pinzón, ya que Álvarez y Morán aún estaban en España.

Para evitar que los primeros emigrantes alertaran a los segundos del engaño, los 27 fueron llevados a la provincia de Córdoba, que dista 800 kilómetros de Barcelona, ciudad en la que se encontraban los 11 primeros.

Pero este segundo grupo fue más precavido y, en vez de depositar la suma completa, entregaron sólo la mitad (Q363 mil 400 por los 27), lo que los salvó de adquirir una deuda más grande que ahora tendrían que abonar.

Cinco días después de llegar a Córdoba fueron abandonados también. Una vez más, una asociación católica de la zona los albergó en sus instalaciones y les ofreció los tres tiempos de comida durante más de 15 días.

“Lo único que tenemos es que agradecer lo bien que nos trataron los españoles y lo mucho que se interesaron en nuestro caso”, añadió uno de los afectados.

Los emigrantes pusieron una denuncia ante el Defensor del Pueblo de Córdoba para que se investigara la red de trata de personas que los había llevado hasta España. La investigación sobre lo sucedido se está llevando a cabo de manera simultánea en España y Guatemala.

Según Marta Altolaguirre, viceministra de Relaciones Exteriores, desde que conocieron el caso se pusieron en contacto con la embajada española.

En España viven aproximadamente dos mil 500 guatemaltecos, según registros de la Embajada de Guatemala en este país. Para viajar al país europeo sólo hace falta un pasaporte vigente, lo que te otorga un permiso inmediato de turista por tres meses. Pasado este tiempo hay que tramitar una visa de residencia y de trabajo.

Vendió su terreno

Para pagar los Q40 mil que le pidieron para que su hijo viajara a España, Esteban Con tuvo que vender el terreno que guardaba para poder dejárselo como herencia a sus hijos. Con se siente estafado, ya que mientras él perdió su propiedad, su hija tiene que pagar los intereses que está generando el préstamo que su yerno pidió para poder emigrar. Por ello, presentó ante el Ministerio Público una denuncia por estafa.

Albergue: Los buenos samaritanos

Los 27 guatemaltecos que fueron llevados a la provincia de Córdoba consiguieron sobrevivir ofreciendo sus manos, curtidas por el trabajo en el campo, a los dueños de las fincas de esta provincia.

Para evitar que tuvieran que vivir en la calle, fueron alojados en un albergue temporal, en el que además de un techo se les ofrecían los tres tiempos de comida. Además, interpusieron una denuncia ante el Defensor del Pueblo de Córdoba.

Techo y comida: Apoyados por evangélicos

Los 11 vecinos de Santiago Sacatepéquez que fueron llevados a Barcelona vivieron durante 15 días en apartamentos alquilados en los que dormían hacinados, pero después de ese tiempo fueron abandonados y tuvieron que dormir dos días en la calle, hasta que una iglesia evangélica se ofreció a prestar sus instalaciones para que tuvieran dónde dormir y qué comer. Algunos de ellos están aún buscando trabajo.