La Generalitat se gastará 2,3 millones de euros en «catalanizar» a los inmigrantes

ABC, 10-07-2007

IVA ANGUERA DE SOJO

BARCELONA. El Gobierno catalán invertirá en los próximos tres años 2.358.000 euros en un plan para la actualización de la inmersión lingüística que busca, en definitiva, garantizar que la llegada de inmigrantes a las escuelas catalanas no debilite el conocimiento del catalán en esta comunidad. El consejero de Educación, Ernest Maragall, presentó ayer el programa, que se pondrá en marcha en septiembre y que debe servir para formar a 3.000 profesores de las escuelas e institutos con mayor porcentaje de población inmigrante.

Maragall no quiso especificar zonas, puesto que la primera parte del programa consiste, precisamente, en que la inspección del Departamento de Educación de la Generalitat detecte los 500 centros con más alumnos de origen foráneo, aunque señaló como obvias las poblaciones del área metropolitana de Barcelona y de las otras tres capitales catalanas, así como barrios de casi todas las ciudades medianas.

El consejero destacó que en los últimos ocho años el porcentaje de alumnos inmigrantes ha pasado del 2,3 por ciento al 13,8 en Primaria y Secundaria. Unas estadísticas que, como recordó Maragall, «implican que hay centros con un 40, 50 o incluso porcentajes mayores de alumnos inmigrantes». El plan, aseguró Maragall, «nos garantiza que el 100 por cien de los alumnos» concluye su escolarización obligatoria dominando catalán y castellano.

El catalán, debilitado

Maragall aseguró, en este contexto, que el catalán ha sufrido un retroceso, especialmente en la educación Secundaria, en los últimos años, lo que a su juicio justifica las últimas medidas de su departamento, como la inclusión de la inmersión lingüística en este ciclo educativo.

Sin embargo, rechazó las medidas propuestas ayer mismo por la Ejecutiva de ERC – partido que forma parte del Gobierno catalán – , entre las que se encuentra el impulso del uso del catalán «como lengua vehicular dentro de los centros», medida que incluye «dar instrucciones claras al profesorado» para que use el catalán y evite que «sean los alumnos quienes den la pauta respecto a la lengua que hay que hablar».

El consejero socialista señaló que esta propuesta «es un doble error», en primer lugar porque «va en la línea de imponer la lengua, no de convencer» – Maragall aseguró que su plan buscará la complicidad de las familias en la inmersión lingüística de los alumnos – y segundo, porque la escuela ya es el ámbito en el que la lengua catalana recibe más atención. «El catalán donde es más fuerte es en la escuela; los problemas empiezan en la puerta de los colegios», advirtió.

La portavoz de ERC, Marina Llansana, negó que su formación quiera imponer el catalán «en los bares o los pasillos», pero sí que el catalán se utilice «en todas las actividades que se desarrollen en el centro escolar, sean escolares o extraescolares».

ERC, que defenderá esta propuesta en el seno del Gobierno catalán, quiere además recuperar el Decreto de usos lingüísticos en centros no universitarios – donde todavía no hay regulación al respecto – preparado en la anterior legislatura, cuando ERC ocupó esta consejería.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)