Una vez más, el drama de la inmigración irrumpió en forma de patera en una zona turística de Canarias. Un cayuco con 37 inmigrantes subsaharianos a bordo, dos de ellos muertos, arribó en la madrugada de ayer al puerto de Los Cristianos, en Tenerife. Uno de los subsaharianos había muerto antes de alcanzar el muelle, mientras que el otro, que se encontraba herido muy grave, falleció antes de que llegase el equipo de sanitarios de la Cruz Roja.

Sobre las doce y media de la noche, el centro de coordinación de Salvamento Marítimo localizó la embarcación, que fue conducida hasta la costa por una patrullera de la Guardia Civil. Uno de los fallecidos es un varón de 18 años, aseguraron las mismas fuentes de Cruz Roja, que no disponían de datos de la otra víctima mortal.

En cuanto al resto de los inmigrantes, dos de ellos están heridos graves por deshidratación y quemaduras, y permanecen ingresados en un centro hospitalario. Los demás, que sufren lesiones similares aunque menos graves como consecuencia de la dura travesía, fueron trasladados a la comisaría de la Policía Nacional.

Almería también fue ayer punto de llegada de expediciones de inmigrantes. En concreto, tres fueron las pateras que llegaron a la costa de Cabo de Gata con un total de 36 inmigrantes a bordo, todos varones, mayores de edad y en buen estado de salud.

Fuentes de Salvamento Marítimo precisaron que el Servicio de Vigilancia Aduanera alertó a las 21.00 horas del martes de la presencia de una embarcación neumática a 30 millas al este de la costa almeriense. Salvamento Marítimo envió un helicóptero y una patrullera a la zona. Apenas cinco minutos después, responsables del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) dio aviso de la localización de otras dos pateras a unas ocho millas al sur de Cabo de Gata. Inmediatamente, las autoridades enviaron a la zona varias embarcaciones de rescate. Sin embargo, uno de los dos cayucos llegó por sus propios medios a Cala Chica, donde arribó sobre las 22.15 horas.

Salvamento Marítimo trasladó de forma conjunta a los once ocupantes de la primera patera avistada y a los siete de la segunda embarcación interceptada en el agua, todos de origen magrebí. Entretanto, la Guardia Civil rastreó durante toda la noche la zona próxima a Cala Chica, donde arribó el tercer cayuco y detuvo a otros 18 hombres: ocho argelinos, cuatro marroquíes, tres libios y tres iraquíes.