La Hachadura recibe a los de México

La Prensa Gráfica, 30-06-2007

En la frontera de La Hachadura a diario se recibe un promedio de 50 personas que vuelven deportadas de México. Es la puerta de reingreso a El Salvador, según los acuerdos de repatriación ordenados entre esa nación norteamericana y nuestro país. Algunos de estos viajeros fueron capturados por la migración mexicana a punto de lograr la meta y cruzar la frontera con Estados Unidos; otros recién comenzaban su travesía al ser detenidos en Chiapas.

Todos ellos recuerdan con horror los vejámenes sufridos en México por tratar de llegar hasta el sueño americano.

Robos, violaciones, palizas son algunos de los recuerdos más frescos en la mente de los compatriotas.

Douglas Ernesto Moreno, oriundo de Ciudad Arce, llegó el jueves a la frontera procedente de Chiapas, donde estuvo recluido unos días antes de ser deportado. Venía con 44 deportados más, de los cuales 10 eran mujeres.

Su viaje duró apenas 16 días y para la travesía solo llevaba un par de mudadas y algo de dinero, el cual perdió en Veracruz al ser asaltado cuando iba en compañía de otros salvadoreños.

Ellos solo esperan a los indocumentados, cuando vieron al grupo en que íbamos nos salieron al paso y amenazándonos nos desnudaron y revisaron todas nuestras pertenencias, ahí nadie se salva de sufrir asalto, relató.

A su lado, Amílcar Barrera, quien viajaba con él, dijo que tras el asalto tuvieron que caminar unos 20 kilómetros hasta llegar a un lugar que le llaman El Águila a esperar el tren, pero antes que pudieran abordarle los sorprendieron las autoridades mexicanas.

Por su parte, José Luis Arévalo aseguró no haber sufrido muchos vejámenes, pero sí recuerda que desde que salió del país por la frontera de San Cristóbal tuvo que pagar a los policías de Guatemala para seguir su camino. Si uno no lleva dinero, ya se fregó, resumió Arévalo.

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