Tontxu Campos insiste en que el curso que viene no habrá centros con más de un 30% de estudiantes extranjeros

vitoria. El Departamento vasco de Educación se encuentra elaborando un decreto para impedir la escolarización de más de un 30% de inmigrantes por centro. La medida, ya anunciada hace unos meses por el consejero Tontxu Campos, pretende evitar la concentración de estudiantes extranjeros en las aulas ante la alarma suscitada por la creación de guetos en algunos colegios de la comunidad autónoma vasca, sobre todo en aquéllos que ofertan el modelo A, íntegramente en castellano.

El titular de Educación espera que el próximo curso escolar se consiga un mejor reparto del alumnado entre los centros de la red pública y la concertada. Para ello, lo que el departamento propone es un cupo de estudiantes inmigrantes que los colegios no podrán rebasar. Sin embargo, en su aplicación, tal y como explicó ayer Campos en su comparecencia en el Parlamento Vasco, podría darse una vulneración del derecho que tienen los padres a elegir el centro en el que estudian sus hijos, y por lo tanto podría resultar “discriminatorio”. En este sentido, Campos admitió que el departamento estudia la mejor fórmula de lograr que no haya ningún centro, ya sea público o privado, con más de un 30% de alumnado inmigrante. “A partir de esas tasas ya hay riesgo de fractura social”, advirtió el consejero.

Lo que sí se ha fijado ya, y de hecho así se recoge en el acuerdo firmado recientemente entre el Departamento vasco de Educación y CCOO, es la necesidad de aumentar la plantilla con el fin de responder a las necesidades educativas de los estudiantes no nativos.

Así, anunció que para el curso 2007 – 2008 el número de profesores de refuerzo lingüístico pasará de 180 a un total de 250. Por otro lado, los centros que presenten una tasa de alumnado inmigrante superior al 30% en Educación Primaria y al 20% en Secundaria, se les concederá a sus profesores un crédito horario equivalente a la mitad de su jornada laboral, “para diseñar un plan de integración dirigido a trabajar con el alumnado inmigrante y sus familias”.

Asimismo, el consejero recordó que Euskadi tiene “el mejor reparto entre la escuela pública y la privada” ya que el 85% de los centros escolares tiene menos del 10% de alumnos inmigrantes. “De todos modos, al departamento se nos hace difícil establecer cómo realizar el reparto para no forzar la voluntad de las familias”, añadió.