La Secretaría de Relaciones Exteriores de México ha protestado ante el Gobierno estadounidense por lo que considera una invasión del territorio mexicano con la construcción de su muro fronterizo para frenar el paso clandestino de emigrantes. Según la carta diplomática enviada por la Cancillería, la invasión fue detectada en una de las inspecciones que realiza la Comisión Internacional de Límites y Aguas.

La denuncia señala que en la zona de Palomas, en el Estado de Chihuahua, el muro metálico que está construyendo Estados Unidos penetra en territorio mexicano al sur de la línea fronteriza. Washington ha respondido que retirará esta sección del muro. El Gobierno mexicano rechaza la obra, aprobada por el Congreso estadounidense, y considera que va en contra del clima de cooperación entre los dos países.

El Senado de EE UU votó ayer a favor de la reanudación del debate sobre la reforma migratoria, que promueve reforzar la seguridad fronteriza y permitiría legalizar a millones de inmigrantes indocumentados.