Abogan por legalizar a beneficiados con TPS

La Prensa Gráfica, Milena Varón, 26-06-2007

Organizaciones cabildearán a favor de los amparados con base en el tiempo de residencia y que sus antecedentes son revisados en cada reinscripción.

Ante la incertidumbre que existe en Estados Unidos frente a la aprobación de una reforma migratoria que favorezca a unos 12 millones de indocumentados, organizaciones pro inmigrantes pedirán al Congreso otorgar la residencia permanente a los amparados por el estatus de protección temporal (TPS, por sus siglas en inglés).

Creemos que existen grupos específicos que están listos para acceder a la residencia, los amparados por el TPS cumplen con muchas de las exigencias de los congresistas; entonces ellos pueden ser el primer grupo beneficiado, se lo merecen, explicó Jorge – Mario Cabrera, vocero de CARECEN.

Estados Unidos mantuvo este beneficio para unos 300,000 centroamericanos de los cuales el grupo mayor son los salvadoreños con 230,000 beneficiados.

Las actividades que iniciarían esta semana van encaminadas a que estas personas tengan un tratamiento especial, así como para los estudiantes indocumentados que piden su legalización por medio del Acta de los Sueños.

Luis Hernández, representante de ASOSAL, sostiene que existe una brecha entre la población indocumentada y los amparados por el beneficio, y es momento de aprovecharla. La revisión de los antecedentes criminales a los que son sometidos sumada al tiempo de residencia en el país serán utilizados como elementos de base para la iniciativa.

Con la esperanza de poder acceder más rápido a la residencia permanente Belisario Pérez, quien perdió el amparo del TPS el año pasado, emprendió la lucha por recuperar el beneficio. La última vez que apliqué me lo negaron porque falté a una cita pero a mí nunca me llegó la fecha en la que tenía que presentarme, explicó.

Desde el 93 estoy aquí, y no he podido arreglar, yo no creo que califique para eso de la reforma porque a esta edad ya me queda muy difícil aprender inglés; mi única salvación es que me devuelvan mi TPS, advirtió Pérez.

Ahora, además de perder la protección del beneficio que evitaría una deportación, el connacional se enfrenta a perder los privilegios de vivienda que obtuvo por medio del TPS. Los problemas aumentaron cuando el permiso de trabajo expiró obligándolo a ganarse la vida como vendedor ambulante.

Por otra parte, en su intento por ampliar el beneficio, la migueleña Victoria Rodríguez dejó su trabajo de limpieza en Los Ángeles y viajó a Washington.

En sus intervenciones frente a los congresistas, la cuscatleca amparada por el TPS explicó su calvario al permanecer alejada de sus hijos por más de 12 años y pidió una solución al limbo migratorio en el que se encuentran los amparados por este programa.

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