Los cinco sindicatos de la Policía Nacional han instado a la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, así como a las compañías aéreas, a articular medidas que garanticen la seguridad de los agentes que ejecutan las órdenes de expulsión de inmigrantes .

En un comunicado conjunto, el Sindicato Uniformado de Policía (SUP), la Confederación Española de Policía (CEP), la Unión Federal de Policía (UFP), el Sindicato Profesional de Policía (SPP) y el Sindicato de Comisarios (SC) lamentan profundamente la muerte del ciudadano nigeriano que falleció el pasado 9 de junio cuando era deportado en avión a su país, pero defienden la actuación de los policías que lo custodiaron.

Según el comunicado, que se produce después de que la Fiscalía de Elche haya solicitado la declaración como imputados de los dos policías que custodiaron al nigeriano fallecido, Osamuyia Akpitaye, la actuación de los agentes se ajustó en todo momento a derecho.

La nota la firman los secretarios generales y presidentes nacionales de estos sindicatos, quienes recuerdan que la máxima prioridad de los agentes fue proteger la integridad física del expulsado, del pasaje, de la tripulación y la suya propia.

Reiteran que era la tercera vez en una semana que se intentaba expulsarle y en todas ellas la actitud del nigeriano, con múltiples antecedentes policiales, fue “extremadamente agresiva y de nula colaboración con los funcionarios”.

Las organizaciones sindicales insisten en que la muerte del nigeriano fue “súbita y repentina” y niegan que se le introdujera ninguna venda o similar en la boca, y tampoco que se le tapara con cinta adhesiva.