EL PERIÓDICO

LA LLEGADA
El 9,1% de la población que vive en Catalunya es inmigrante. El 39% de los extranjeros proceden de África, y otro 38%, de América Latina. De los encuestados, el 78% ha llegado a Catalunya en los últimos siete años. La mayoría emigró para tener una vida mejor (40%) y encontrar trabajo (24%). Pocos inmigrantes esperan irse; de hecho, el 60% aspira a vivir en Catalunya en los próximos
cinco años.

LA RELIGIÓN
La fe tiene un peso específico elevado entre la inmigración, mucho más alto que entre los catalanes. Para el 62% de los extranjeros (frente al 28% de
los autóctonos) la religión es bastante o muy importante. Y la fe no alcanza únicamente a los islámicos, sino también a la nutrida comunidad católica que procede de los países de América Latina.

LA COMPAÑÍA
La mayoría de los llegados del exterior, el 39%, viajó solo hasta Catalunya. El 37% vino con su familia, y otro 34%, acompañado de amigos o personas conocidas. Un porcentaje muy elevado, el 21%, vive con amigos, lo que refleja el elevado número de inmigrantes que comparten piso. Solo el 2% de los extranjeros disponen de vivienda para ellos solos. El 18% tiene hijos o cónyuge en el país de origen y el 28% no ha regresado nunca a su tierra. Este no retorno, mayoritariamente temporal, no es por falta de ganas, sino por las dificultades para conseguir los papeles para poder viajar sin trabas.