Harto del Catolicismo, ahora me viene el Islam
Gara, , 11-06-2007Me da tranquilidad comprobar que el entorno social en el que me muevo es cada vez más laico; aunque despacio, el laicismo se extiende Vuestras religiones surgieron del miedo que unos cuantos listos inocularon a gentes humildes, y esto es historia
Estoy bautizado, he hecho la comunión y he sido confirmado, todo ello por la Iglesia Católica. Además, estudié cuatro años con los frailes menesianos. Esto, unido a la profunda tradición católica de mis padres, aunque mi padre hace tiempo que mandó a paseo la creencia en otra vida, me permite hablar del tema de la religión con cierto conocimiento de causa.
Soy ateo militante y hace unos años intenté borrarme de la Iglesia Católica o que eliminaran, al menos, mis datos de sus archivos. Hace ya más de diez años, y los tres motivos que me empujaron a ello fueron su desprecio a la mujer, su homofobia y el posicionamiento de su jerarquía a favor de los poderes fácticos españoles y en contra de la libertad para Euskal Herria. Llamé el Obispado de Bilbo, les hice la petición y me estuvieron dando largas, hasta el punto de que llegué a preguntarles si me tenía que cargar a un cura para que me excomulgaran. Dejé de insistir, más que nada por pereza y por la tranquilidad que me da comprobar que el entorno social en el que me muevo es cada vez más laico. Se comenta que todavía se casa mucha gente por el rito católico y que muchos padres meten a sus hijos en el show de la comunión, pero mi sensación es que, aunque despacio, el laicismo se extiende. No hay más que ver la edad media de quienes acuden a misa cada domingo
En ésas estaba, creyendo que me estaba sacudiendo del yugo del catolicismo, cuando llegas tú, Abdul Haqq Salaberria, haciendo proselitismo del Islam en tu artículo. Intentas venderme que con el Islam daremos la vuelta a una civilización sin respuestas y agotada. Estoy de acuerdo contigo en esta afirmación. Creo que lo que denominamos civilización occidental (o sociedad capitalista) no sólo no tiene soluciones para los problemas de la humanidad, sino que está la raíz de los mismos. Buena parte de esa responsabilidad procede de la Iglesia Católica y el ejemplo de la violencia machista es el más sangrante. Pues bien, esa violencia machista se ha venido desarrollando durante siglos precisamente porque el catolicismo ha vendido el mensaje de la mujer al servicio del hombre y que los trapos sucios de casa había que lavarlos con apaños dentro de la misma casa. Es decir, que el hombre relaje en las formas sus impulsos totalitarios y que se disculpe cuando se le vaya la mano.
Este ejemplo de violencia es uno de los que ha amparado la Iglesia Católica desde siempre, igual que hace hoy en día con los casos de curas pederastas y de la misma forma que siempre ha estado con el poder y sus prebendas. Todo ello al mismo tiempo que vendía, y vende, un discurso humanista en favor de la paz y la fraternidad, porque, según dice, todos somos hermanos.
No sé si hermanos, primos o compañeros, pero sí tengo claro que el ser humano para alcanzar la felicidad o acercarse a ella debe tratar de compartir su vida con armonía con el resto de semejantes. Pero esto es ley natural, no es un descubrimiento divino de un ente superior. Tengo claro que para ser feliz yo debo ver felicidad en mi entorno y debo ayudar a conseguirla al que no la tiene. Esto es así porque es de cajón, es obvio, y no porque lo digan la Biblia o el Corán.
Ahora tú con el Islam me tratas de vender la misma milonga que el Catolicismo (o el Cristianismo en sus vertientes protestantes, evangélicas, adventistas, etc.), con el único argumento de que el Catolicismo tiene gran parte de culpa de los gravísimos problemas de la civilización occidental.
Abdul Haqq, lo tuyo es más de lo mismo, porque ¿qué ofreces tú a las mujeres?, que son, aún hoy en día, ciudadanas de segundo orden a pesar de ser más de la mitad de la población. ¿Qué aporta el Islam contra la violencia machista, si vuestro libro sagrado las cataloga como inferiores al hombre? Y no me digas que eso es una manipulación del Corán o una interpretación errónea, porque eso es lo que imparten vuestros clérigos y en lo que se basan los regímenes islámicos para tenerlas sometidas.
Por otra parte, la existencia del racismo (del que te sientes víctima, y te creo) tiene buena parte de sus raíces en las dichosas religiones. Tan afectados os sentís los musulmanes aquí como los cristianos en países de mayoría musulmana, pero lo que no decís es que vosotros, los religiosos o quienes anunciáis las bondades de vuestras respectivas religiones, no hacéis sino vender miedo a lo desconocido, miedo a lo distinto. De este miedo al que es diferente sólo hay un peldaño hasta el racismo. Ofertáis paraísos futuros a cambio de vidas miserables, reduciendo todo el potencial del ser humano a los designios de vuestros respectivos dioses.
Vuestras religiones surgieron del miedo que unos cuantos listos inocularon a gentes humildes, y esto es historia, no las fábulas que cuentan biblias y coranes.
Tengo claro que a mí ya me metieron una, de la que me ha costado mucho salir, y sólo espero que a otros no se la cuElen ofreciéndoles distinto envoltorio, pero el mismo producto caducado.
(Puede haber caducado)