La secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, apeló ayer a la responsabilidad de los países de la UE y al cumplimiento de las leyes marítimas en situaciones en las que inmigrantes naufragan cerca de sus costas y su vida corre peligro.

En declaraciones a la prensa tras asistir a unas jornadas sobre inmigración, organizadas por el Consejo General de Procuradores, Rumí insistió en sus críticas a la actitud de Malta cuando hace unos días denegó su auxilio a 26 inmigrantes que al final fueron subidos a bordo por el pesquero español “Montfalcó”.

Ello motivó una queja formal de España en la Unión Europea, explicó Rumí, quien añadió que todos se encuentran “bien” en un centro de acogida de Tarragona desde el pasado sábado.

El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados comprobará si estas personas proceden realmente de Costa de Marfil y si pueden acogerse al estatus de asilo.