madrid. Las demoras que se producen en el Registro Civil central crean situaciones de “extrema desesperación en los ciudadanos”, según señala el informe del Defensor del Pueblo, que denuncia el caso de quienes, tras esperar años a que se les conceda la nacionalidad, “son españoles indocumentados”.

En el informe correspondiente a 2006 que el Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, entregó ayer en el Congreso de los Diputados, se señala que estas personas, “tras haber tenido que esperar años para que se resolviera su solicitud de concesión de la nacionalidad española se encuentran con que, una vez son españoles, no pueden ejercer sus derechos civiles, políticos, sociales, administrativos o laborales”. “A su pesar, son españoles indocumentados, ya que el Registro Civil se demora en practicar la inscripción de su nacimiento y en expedir las correspondientes certificaciones que se les exigen para poder obtener el DNI y el pasaporte”, critica el Defensor del Pueblo.

En materia de Justicia, el informe destaca las quejas recibidas durante el pasado año en relación con el servicio público judicial que ponen de manifiesto un año más la insatisfacción de los ciudadanos. Las demoras en los procedimientos judiciales, la falta de información por parte de los funcionarios de la Administración de Justicia y la ineficaz gestión de sus recursos, tanto humanos como materiales, son las principales deficiencias señaladas.

Enrique Múgica, constata también en el informe que “cada vez resulta más difícil” que los reclusos reciban un “tratamiento adecuado” dadas las “elevadas cifras” de internos en los centros penitenciarios. El número de internos en el sistema penitenciario español era de 60.980 en enero de 2006, pero a finales de ese mismo año la cifra se elevó hasta los 63.991, con lo que el incremento fue de 3.011 presos, lo que representa un aumento del 4,93%.