Miles de murcianos se apresuraron ayer a visitar las urnas para después poder disfrutar de un espléndido día con familiares y amigos. Otros prefirieron primero la playa y despues las urnas. Unos, de comunión; otros, a la montaña; y aquellos tendidos sobre la arena de cualquier playa o repantigados en el sofá disfrutando de la programación televisiva dominguera.

El día transcurrió muy tranquilo y sin más incidentes que los típicos de «¿por favor, yo voto aquí?», o aquellos más curiosos como el ocurrido en Cartagena en donde una mujer preguntaba a un policía «perdone, a quién tengo que votar yo». Otros, sin embargo, como un ciudadano de holandés que fue a votar y no lo encontraron en las listas de su colegio electoral. Sin más, se dirigió a las oficinas del censo electoral de la capital murciana y allí le facilitaron un certificado que atestiguaba que se encontraba censado y tenía todo el derecho a votar.

Nadie dijo que votar estuviera exento de peligrosidad. Una mujer resultó herida en la cabeza a primera hora de la tarde al golpearse con unos hierros de una techumbre baja saliendo de su colegio electoral.

Aún así la ganas de participar en estas elecciones se dejaban notar. Un ejemplo de ello es Toñi Urbano, una ciudadana residente en Los Alcázares que la pasada semana sufrió un robo y perdió toda su documentación. Ni corta ni perezosa, se marchó directamente a la comisaría de policía de Murcia para renovar el DNI y así poder ejercer su derecho. Otro caso singular de afán por ejercer su derecho es el de Mariano Romero, que con 95 años se acercó acompañado de su hija a votar. Su voto se lo entregó a la presidenta más joven de Murcia, Fuensanta, que con 18 años recién cumplidos supo desempeñar muy bien su papel.

Por su parte María Camacho, a sus 100 años cumplidos el pasado 22 de abril, María Camacho Lucas de Cieza ejerció su derecho al voto en el colegio electoral situado en la Casa de las Artes y la Música.

Una jornada que aunque tranquila, no estuvo ausente de los típicos despistes de los miembros de la mesa. En el colegio electoral Federico de Arce de Murcia, un inglés tenía su voto preparado para votar sólo en las municipales – como dice la ley – pero un vocal de la mesa le comunicó «caballero, vote también en las autonómicas porque entonces nos descuadra el recuento de votos».

A la jornada de ayer, por no faltarle no le faltó ni su concentración. Una reivindicación de varias docenas de personas que pedían en la Plaza del Ayuntamiento de Murcia ceder su voto a los inmigrantes. Cinco ONG´s llevaron papeletas electorales para que los extranjeros pudieran elegir por ellos los que querían que llegasen a las urnas. Ni siquiera faltó aquellos que se presentaron en un colegio electoral de Murcia e intentaron votar con pegatinas de una formación política. La policía local tuvo que obligarles a que se las retiraran para poder ejercer su derecho. Incluso, el delegado del gobierno explicó que en un colegio electoral de Mula aparecieron sendas pintadas con alusiones a ETA.

En cuanto a los candidatos, Miguel Angel Cámara y Ramón Luis Valcárcel ambos llegaron a sus mesas acompañados de sus hijos que votaban por primera vez. El candidato a la presidencia de la comunidad, animó los murcianos a que ejercieran su derecho y participaran en la «fiesta de la democracia» antes de votar en el colegio electoral habilitado en el Museo Ramón Gaya de la capital. La candidata de IU a la alcaldía de Murcia, Esther Herguedas, celebró ayer su cumpleaños votando.

«Como amigos» así es como los presentes en una mesa electoral del colegio Félix Rodríguez de la Fuentes. Su presidente manifestó que «están ta tanto tiempo junto que hasta ya se han hecho amigos».

Los servicios de la Cruz Roja realizaron en total 147 salidas en toda la Región de Murcia para acercar a las personas dependientes hasta sus colegios elecotorales para que ejercieran su dercho a votar. Unos recien casados en Mula

Los más chicos también participan en la jornada electoral