Favorecer la inclusión laboral y el arraigo de las personas migrantes es el objetivo del programa Errotu que ha puesto en marcha Bidasoa activa. Con el sector de la hostelería como marco, diez hombres y mujeres están siguiendo un itinerario formativo cuyo primer módulo terminarán esta semana. La formación tiene un segundo módulo y culminará con prácticas no laborales y un contrato laboral en empresas del sector.

«Nos están proporcionando las mejores herramientas para ingresar en el mercado laboral». Así resume Alan, estudiante del taller, la experiencia que está viendo junto a una decena de compañeros que «hemos venido a este país a salir adelante y dar un poco de cada uno de nosotros». Agradece «la calidad» del programa y el «apoyo constante» de Bidasoa activa y de los «excelentes profesores», de quienes «cada día aprendemos cosas nuevas».

Su profesor, Martín Ovide, devolvía el agradecimiento poniendo el foco en «el buen grupo que me ha tocado»: de ellos y ellas subrayaba su buen hacer en los fogones pero también «en el orden, y la limpieza, que son cuestiones fundamentales». Destacó «el compañerismo» entre los estudiantes y el «trabajo fundamental» que estos están desarrollando para «salir adelante». Además de la formación estrictamente vinculada a la hostelería, este programa incluye asesoramiento jurídico en materia de extranjería «y temas burocráticos que pueden resultar un poco dificultosos». Y se nota: «todo se está haciendo mucho más ameno», aseguraba.

Nuria Alzaga, presidenta de Bidasoa activa
«No sólo se favorece la inclusión laboral, sino que también se responde a las necesidades de un sector clave como la hostelería»
Ganar confianza en sí mismos
También Smiley transmitía su «eskerrik asko» tanto a Bidasoa activa como «a la ciudad de Irun, que me han dado la oportunidad de formarme para entrar en el mercado laboral de Gipuzkoa». Reconoce que al iniciar este itinerario formativo «tenía muchos nervios, porque no sabía a lo que me enfrentaba». Unas semanas después siente que «me he desenvuelto bien y he logrado desarrollarme mucho». Su compañera Elisabet añadía que, «además de una oportunidad, este curso nos está permitiendo ganar confianza en nosotros mismos». Kristian, también estudiante del taller, resumía el sentir general asegurando que «creo que hablo por todo el grupo si digo que estamos agradecidos».

Reforzar el arraigo
En estos últimos días antes de concluir el primer módulo de la formación, los estudiantes aprenden en las cocinas que Bidasoa activa tiene en las instalaciones del Antiguo Hospital. Allí recibieron ayer la visita de Nuria Alzaga y Estitxu Urtizberea, presidenta y vicepresidenta de la agencia comarcal. Errotu «responde a las necesidades de un sector clave para nuestra economía, como es la hostelería», subrayó Alzaga. El programa también incide en el compromiso de Bidasoa activa con «la cohesión social. Es un programa de formación y de empleo que también ofrece la oportunidad de reforzar el arraigo» de los estudiantes en la comarca del Bidasoa. La motivación y el compromiso de los participantes, incidió Alzaga, es «una de las claves del éxito» de esta iniciativa. «Probablemente, vuestro proyecto personal y vuestro viaje hasta aquí no ha sido fácil», les expresó, por su parte, Estitxu Urtizberea. «Las administraciones tenemos que seguir quitando barreras para que podáis integraros en nuestra sociedad. Programas como Errotu intentan que nuestra comarca sea más amable en ese sentido», concluyó Urtizberea.