El Ministro de asuntos exteriores de España, José Manuel Albares, ha comparecido junto a su homólogo marroquí, Nasser Burita, para anunciar que la reunión de alto nivel (RAN) entre ambos Ejecutivos se celebrará entre finales de enero y la primera semana de febrero.

Con motivo del foro ministerial de la Unión por el Mediterráneo celebrado este jueves en Barcelona, los jefes de la diplomacia de ambos países han ratificado su intención de acercar posturas, tras la última toma de contacto este martes en Fez (Marruecos) en el foro de la Alianza de Civilizaciones de la ONU.

Alabares ha destacado que la de este jueves ha sido su séptima reunión con Burita, que no visitaba España desde hace tres años por los múltiples desencuentros diplomáticos entre ambos países, especialmente agravados en 2021 con el ingreso en abril de Brahim Ghali, líder del Frente Polisario, en un hospital de Logroño por Covid-19, y la posterior entrada masiva de inmigrantes irregulares a la ciudad autónoma de Ceuta ante la impasividad de la policía marroquí.

La cumbre hispanomarroquí, de hecho, llevaba sin celebrarse desde 2015. Rabat suspendió unilateralmente la programada para diciembre de 2020, por lo que este será el primer acercamiento público al más alto nivel entre ambos países desde que España abandonara este año su postura de neutralidad respecto al conflicto del Sáhara Occidental para abrazar la propuesta de Rabat de convertir en autonomía la antigua colonia española.

Desde entonces, se ha trabajado en un primer encuentro entre ambos países a principios de 2023, pero hasta hoy la fecha seguía pendiente de las «sobrecargadas agendas internacionales» del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del rey Mohamed VI.

Albares y Burita, han asegurado que la hoja de ruta pactada durante la visita del presidente español a Rabat en abril se está cumpliendo punto por punto. De hecho, han asegurado que la inmigración irregular procedente de Marruecos se ha reducido un 20 por ciento y el intercambio comercial ha crecido un 30 por ciento.

El anuncio del encuentro se ha producido en el marco de la reunión en Barcelona de la Unión por el Mediterráneo, una organización formada por 42 gobiernos –27 estados miembros de la Unión Europea y 15 del norte de África, Oriente Medio y sudeste de Europa–. El objetivo principal de la UpM es mejorar la integración norte-sur en la región mediterránea, potenciar el desarrollo de los países que la componen y asegurar su estabilidad.

Fue fundada en 2008 en la Cumbre de París para el Mediterráneo, con el objetivo de reforzar el Partenariado Euromediterráneo (Euromed) creado en 1995 y conocido como Proceso de Barcelona. Desde entonces constituye un espacio de debate donde tomar decisiones conjuntas desde ambas orillas del Mediterráneo.