Dos pateras con 129 inmigrantes de origen subsahariano y entre los que se encontraban dos bebés y siete mujeres, llegaron ayer al puerto de Motril tras ser interceptadas por las autoridades. Los dos bebés apenas alcanzan el año de edad y viajaban con sus madres.

Los tripulantes de las dos embarcaciones se encontraban en buen estado de salud, aunque presentaban claros síntomas de cansancio y algunos de ellos incluso quemaduras. Un inmigrante tuvo que ser atendido de heridas leves y varios por contusiones de diversa consideración producidas durante la travesía. Tras la primera asistencia sanitaria, dos de ellos fueron evacuados al hospital Santa Ana de Motril.

Las pateras fueron localizadas a las 18.45 por el Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) a unas siete millas frente a Castell de Ferro, hacia donde se dirigió una embarcación de salvamento de Motril y una patrullera de la Guardia Civil. De este modo remolcaron a los inmigrantes, que llegaron al puerto de Motril tras una corta travesía de veinte minutos, donde los voluntarios de un dispositivo sanitario de Cruz Roja les atendieron desde su llegada. Se trata de la expedición de inmigrantes subsaharianos más numerosa llegada este año a la costa de Granada, tras la patera detectada el pasado domingo con 70 subsaharianos a bordo.