Nueve solicitantes de asilo político que viajaban en el buque ‘Marine I’ y que se encontraban en Canarias han sido expulsados a Sri Lanka, pese a la grave situación de conflicto que vive el país. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (Cear) denunció ayer que el Ministerio del Interior ha cometido «una violación flagrante del derecho de asilo» de estos nueve solicitantes.

El coordinador del Servicio Jurídico de Cear, Mauricio Valiente, destacó que, por primera vez desde que gobierna Zapatero, el Ministerio del Interior se ha opuesto al criterio de Acnur, que se mostró a favor de concederles el asilo.

Valiente recordó, además, que los repatriados formaban parte del grupo de 35 inmigrantes que fueron especialmente seleccionados en Nuadibú (Mauritania) y enviados a Canarias para que solicitasen asilo.

«Se ha actuado con premeditación, lo que ha provocado una situación de indefensión de estas personas», criticó Valiente. Según sus datos, el jueves 22 el Ministerio del Interior dictó la resolución de inadmisión a trámite, pero tardó dos días en notificar la decisión. Este «retraso premeditado», según Cear, perjudicó las labores de la ONG para paralizar las expulsiones, porque el fin de semana no funciona el juzgado competente.

Desde Interior alegaron que las solicitudes fueron estudiadas por un grupo de expertos y que seis de los expulsados habían pedido en Nuadibú el retorno voluntario a su país. Además, argumentaron que los inmigrantes no fueron repatriados a lugares de conflicto, sino a zonas seguras de Sri Lanka.