INMIGRACIÓN

España pide a Guinea Conakry que acepte a los ´sin papeles´ del ´Happy Day´

El barco, que se dirigía hacia las islas Canarias antes de ser interceptado, transporta a unos 300 inmigrantes procedentes de India y Pakistán

La Vanguardia, Agencias. MADRID, 26-03-2007

La Organización Internacional de las Migraciones (OIM) se hará cargo de las repatriaciones de los cerca de 300 inmigrantes clandestinos de India y Pakistán que se encuentran a bordo del barco de bandera norcoreana Happy Day,que se dirige a Guinea Conakry, aunque ayer aún estaba en aguas senegalesas. Pero antes España deberá conseguir el permiso de Guinea Conakry para que acepte el desembarco en su país.

Según fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores español, un avión senegalés y barcos de la marina de este país siguen el rumbo del Happy Day,que partió de Guinea Conakry hacia el norte, con destino a las Islas Canarias, pero fue interceptado en Senegal por un dispositivo de la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex).

El barco había sido localizado el pasado jueves a unas 80 millas de la costa de Dakar por la patrullera italiana Dáttilo,perteneciente a Frontex; en un dispositivo que se puso en marcha a raíz de una información suministrada por España ya que, indicaron las mismas fuentes, existía la sospecha de que llevaba inmigrantes ilegales. El buque fue inspeccionado y se comprobó que, efectivamente, llevaba cerca de 300 inmigrantes, por lo que se cambió su rumbo para que se dirigiera hacia su puerto de origen en Guinea Conakry. Las autoridades españolas han hablado con las de ese país para que los inmigrantes que van a bordo sean repatriados a sus países de origen con la colaboración de la OIM, organización que se hará cargo de las repatriaciones. La tripulación de este buque es de nacionalidad georgiana.

El Happy Day,cuyo nombre, atendiendo a su carga, parece una broma de mal gusto, es el segundo barco cargado de emigrantes ilegales localizado en aguas africanas desde principio de año. El primero fue el Marine I,que el 4 de febrero se averió en aguas internacionales cuando se dirigía a las islas canarias con 369 personas a bordo, la mayoría indocumentados y originarios de India y Pakistán. El navío fue llevado a un puerto mauritano, Nuadibú. Ayer se supo que otras 115 personas de esta última nacionalidad procedentes del buque serán repatriados en los próximos días, con lo que sólo quedarían 31 inmigrantes en la costa de Mauritania, informaron fuentes diplomáticas, que precisaron que la salida de este nuevo grupo de pakistaníes tendrá lugar antes del próximo día 28 desde Nuakchot, la capital de Mauritania. También precisaron que todos se han acogido a la repatriación voluntaria, al igual que otros 24 que fueron repatriados hace diez días.

Una vez producida esta nueva repatriación, quedarían en el puerto de Nuadibú sólo 31 inmigrantes que, o están pendientes de obtener su documentación, o se resisten a ser identificados.

Fuentes de Cruz Roja Española cifraron en 138 el número de inmigrantes que permanecen en Nuadibú y explicaron que tres de sus miembros y otros 15 de la Media Luna Roja se ocupan desde el pasado 13 de febrero de la asistencia alimentaria e higiénica de las 368 personas desembarcadas inicialmente del Marine I.En este tiempo, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha coordinado las repatriaciones voluntarias.

Por otra parte, un grupo de 32 inmigrantes procedentes de Bangladesh, que estaban acogidos en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CEIT), fueron expulsados ayer de Ceuta a ese país en una operación policial coordinada por el Ministerio del Interior.

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