La UE se deshace del barco negrero y lo escolta hacia Guinea

ABC, 25-03-2007

ERENA CALVO

LAS PALMAS. Ante la negativa de Dakar (Senegal) a aceptar en su puerto el atraque del «Happy Day», el buque negrero continuó ya desde el viernes su ruta hacia el sur. Miembros de la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex) y de la Marina Senegalesa lo escoltaban ayer, según pudo saber este periódico,hacia la República de Guinea, de donde se presume que partió el buque.

Con bandera norcoreana, el «Happy Day» transporta a cerca de 300 inmigrantes de origen asiático – indios y paquistaníes – , y tras su interceptación por la patrullera italiana «Dattilo», del Frontex, se supo de la detención de la tripulación, integrada por seis personas de Georgia.

El barco tenía como destino el archipiélago canario, por lo que los responsables de Frontex determinaron que la responsabilidad de dirigir las negociaciones a tres bandas (España – Senegal – Guinea Conakry) era del país a donde se dirigía la embarcación.

En un primer momento se señaló a Senegal como el territorio que debía abrir sus puertos al «Happy Day» al haberse interceptado a 80 kilómetros de sus costas. Este país, sin embargo, rechazó tal argumento al asegurar que se había localizado fuera de su área de competencia. Senegal, que participa en el operativo de Frontex con patrulleras cedidas por España, mantiene un acuerdo bilateral con el Gobierno por el que se compromete a admitir a los inmigrantes localizados en sus aguas.

«Conversaciones difíciles»

Desde Exteriores insistieron ayer en la complejidad de las negociaciones, que serán «largas y difíciles», pronosticaron. Al cierre de esta edición, el buque proseguía su rumbo hacia la República de Guinea, aunque sin la seguridad de que los inmigrantes pudiesen ser desembarcados en este país, punto que se seguía negociando ayer.

En el caso del «Marine I», en el que viajaban 369 inmigrantes asiáticos y subsaharianos, también se planteó que se dirigiese a Guinea, de donde había partido supuestamente, aunque la inestable situación política generada por una huelga general en esos días y la falta de pruebas de que partiese de sus costas lo impidió y terminó atracando en Mauritania.

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