El Sindicato Unificado de Policía (SUP) denunció ayer que, a pesar de la incorporación de más efectivos recientemente, todavía faltan más de 30 agentes para cubrir las labores de control en las fronteras de Melilla. En declaraciones a SUR, el secretario general de la Federación de SUP en Melilla, Julián Millán, aseguró que actualmente el Grupo de Frontera de la Brigada de Extranjería y Documentación está formado por, aproximadamente, 70 policías y que el número ideal de agentes para desempeñar estas labores rondaría el centenar.

Control de frontera

Aunque la Jefatura Superior de Policía ha incrementado este servicio con 15 nuevos agentes, de los 25 que se han incorporado recientemente a Melilla, Millán subrayó que «estos 15 se han quedado en 5 porque 10 se han retirado a labores de vigilancia, prevención o investigación», por lo que la demanda es la misma. Es por este motivo que el sindicato volverá a plantear este asunto ante la próxima reunión trimestral que reunirá el próximo 29 de marzo a SUP, Unión Federal de Policía (UFP), y al jefe superior de Policía de Melilla, Florentino Villabona.

Y es que, según Millán, el Grupo de Frontera de la Brigada de Extranjería y Documentación no sólo se encarga de la frontera de Beni Enzar, sino también de los puestos de Farhana, Barrio Chino y Marigüari, así como Puerto y Aeropuerto, de manera que lo ideal sería que por cada puesto de control estén dos agentes en cada turno de ocho horas, de manera que puedan dedicarse cuatro horas a labores documentales y otras cuatro a otros cometidos, como el control de personas, «para incrementar la seguridad en la ciudad».

Cambio de destino

Por otra parte, el secretario general de la Federación de SUP en Melilla adelantó que a la reunión del próximo 29 de marzo llevarán también otra denuncia del sindicato, la «arbitrariedad» a la hora de conceder los cambios de destino a nivel local.

En este punto, Millán señaló que el jefe superior de Policía concede estos cambios «siguiendo sus propios criterios» y «sin valorar los méritos, la capacidad o la antigüedad del agente», de ahí que los califique de «arbitrarios». Una vez celebrada la reunión trimestral, la Jefatura remite un informe al subdirector general operativo de la Policía Nacional que es quien, finalmente, anula o corrobora las decisiones adoptadas, una situación que también denunció el sindicato porque «da un respaldo arcaico a la Jefatura».

Para terminar, aludió a la elaboración del catálogo de puestos de trabajo y subrayó que «si no se hace una valoración real de las necesidades en la frontera, este catálogo será irreal».