El delegado del Gobierno, Jenaro García – Arreciado, consideró «espectaculares» los resultados que ha obtenido el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado después de que la criminalidad descendiera en 2006 un 7 por ciento en relación con el año anterior. La tasa ha quedado en Ceuta en 67,4 infracciones por cada mil habitantes, frente a al 47,7 de la media nacional. Una cifra superior en la ciudad que García – Arreciado ha excusado en el hecho de que la ciudad cuenta con una población flotante de entre 20.000 y 25.000 personas, que aunque también delinquen no cuentan a la hora de realizar el repaso estadístico, lo que eleva la tasa de criminalidad entre un 30 y un 35 por ciento.

Las infracciones más comunes durante el año pasado fueron las realizadas contra el patrimonio, que descendieron en un 13 por ciento. Le siguen las infracciones contra las personas, que bajaron un 5,25 por ciento y contra la seguridad colectiva, que se incrementaron en un 35 por ciento, debido según el delegado a la mayor persecución policial a este tipo de delitos. Las infracciones contra el orden público bajaron un 26 por ciento y contra la libertad sexual, un 4 por ciento.

La cantidad de infracciones esclarecidas se sitúa en el 51,5 por ciento frente al 30,4 de la media nacional. Una cifra que es del 55,1 por ciento en el caso de los delitos y del 43,9 por ciento en el de las faltas. Además, 429 de cada 1.000 infracciones han acabado con la detención de sus presuntos autores.

En cuanto a la delincuencia juvenil, los Cuerpos de Seguridad detuvieron a 413 menores de 16 años, de los que 287 eran extranjeros y tan sólo siete eran mujeres. En cuanto a los detenidos en la franja de edad de entre 18 y 20 años el número final fue de 2.365, de los 2.192 no eran españoles. Los delitos más comunes en la delincuencia juvenil fueron los robos con fuerza y el tráfico de drogas.

Malos tratos

Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil también detuvieron a 8.236 extranjeros, la gran mayoría de ellos marroquíes, y principalmente por delitos contra la Ley de Extranjería. En 2006 también se produjeron 296 infracciones referentes a la violencia contra la mujer, en su mayor parte delitos por malos tratos psíquicos en el ámbito familiar.

En relación a la inmigración las entradas se situaron en 2006 en 1.351, 973 menos que en 2005, lo que supone un descenso del 42 por ciento. Este descenso de la llegada clandestina de ‘sin papeles’, favorecido por la casi paralización de los intentos por el perímetro fronterizo, vino acompañado de la actuación policial. En 2006 se desarticularon 60 redes contra el tráfico de personas, con 105 detenidos y 205 inmigrantes ilegales interceptados.

Actualmente en el CETI permanecen acogidos alrededor de 360 inmigrantes, por lo que Delegación cuenta con un ‘colchón’ de 152 plazas en relación a la capacidad del centro el Jaral.

En cuanto al Tarajal, durante 2006 pasaron por el puesto fronterizo un total de 9 millones de personas, de los que casi 8 eran marroquíes.