AGENCIAS, Madrid/Las Palmas

El Ministerio de Asuntos Exteriores español seguía anoche a la espera de que las autoridades portuarias mauritanas autoricen el desembarco de 200 inmigrantes paquistaníes que se encuentran en un buque averiado y remolcado por Salvamento Marítimo a 12 millas de Nuadibú (Mauritania).

Fuentes de Exteriores informaron de que se han hecho gestiones políticas con Mauritania, y que se está pendiente de aspectos técnicos para el desembarco de los paquistaníes.

España participa en este caso en virtud de un tratado internacional, al que no está adherido Mauritania, que obliga a los países más próximos (en este caso España y Senegal) a auxiliar al buque averiado, y trasladarlo al puerto más cercano, es decir, a Nuadibú, en Mauritania.

Fuentes de Salvamento Marítimo informaron de que su remolcador “Luz del Mar” continúa escoltando en las cercanías del puerto de Nuadibú al buque “Marine I”, que el viernes fue detectado en aguas cercanas a Canarias con 200 inmigrantes paquistaníes irregulares a bordo.

El personal del “Luz del Mar” ha suministrado hasta ahora agua y comida a los inmigrantes paquistaníes, si bien se desconoce si alguno de ellos necesita atención médica, indicaron las fuentes.

Libia impone visados

Las autoridades de Libia han tomado la decisión de imponer el visado a los africanos y magrebíes que quieren entrar en el país, una decisión que podría fomentar más la inmigración ilegal en África Occidental o desde Marruecos.

Esta decisión fue tomada la semana pasada y Libia dijo que el requisito del visado para entrar al país se aplicará este mismo mes. Asimismo, solicitó a decenas de miles de inmigrantes ilegales subsaharianos y de otras nacionalidades que abandonaran el país, y que tienen como fecha límite finales de este mes.

Libia justifica esta decisión porque sus costas se han convertido en los dos últimos años en un punto esencial de la inmigración ilegal, de modo que diariamente varias pateras repletas de marroquíes, argelinos y subsaharianos zarpan desde las costas libias hacia las costas de Italia.

Añade que la inmigración se ha convertido en un tema de tensión con la UE y que la mejor forma de solucionarlo es imponer el visado y expulsar a los ilegales a sus países. El periódico Alquds Árabe escribe que una decisión semejante significa el cierre de la ruta marítima desde Libia a Italia y en consecuencia los inmigrantes buscarán otra ruta con menos vigilancia.

La ruta canaria

Mientras que los observadores creen que hay dos alternativas, los inmigrantes marroquíes apostarán de nuevo por zarpar hacia las costas andaluzas y en menor medida hacia Canarias, mientras que los africanos tendrían una única vía marítima que es zarpar desde las costas de África Occidental hacia las Islas Canarias.