PALMA.Un hombre de nacionalidad ecuatoriana, de unos 40 años, fue detenido ayer por el Cuerpo Nacional de Policía como sospechoso de matar con un arma blanca a su mujer, originaria del mismo país, y al amante de ésta, un ciudadano español, tras sorprenderles juntos en el antiguo domicilio conyugal. Según informaron fuentes policiales y judiciales, el detenido, Augusto F.V.B., quebrantó una orden de alejamiento a más de 500 metros de su esposa dictada por un juzgado de instrucción de Palma el 9 de septiembre de 2006, tras una denuncia por agresión presentada por la mujer, O.K.T, de 30 años.

Sin embargo, según explicaron diversos testigos a los medios de comunicación, la mujer había permitido al sospechoso que regresara a su casa, situada en el tercero del número 11 de la calle Málaga, pese al mandato judicial que le prohibía aproximarse. Uno de estos testigos, Alba, una colombiana antigua compañera de piso del matrimonio, explicó que el jueves O.K.T. había echado del domicilio a Augusto.

Ayer por la mañana, alrededor de las 11.00 horas, el sospechoso accedió al piso, gracias a la colaboración de una vecina de 76 años, que, como en ocasiones anteriores después de que éste alegara haber perdido las llaves, permitió a su antiguo compañero de rellano pasar a la vivienda contigua, de un balcón a otro. Allí, Augusto sorprendió a su mujer con J.J.V.R., un empresario mallorquín de origen catalán, de 43 años, que regentaba la concesión del restaurante del Club Náutico del Portitxol (Palma), donde trabajaba O.K.T. como limpiadora, empleo que compaginaba con el de cajera en un supermercado de la cadena Mercadona.

Fuentes policiales señalaron que, alrededor de las 12.40 horas, el presunto homicida atacó a su mujer y al empresario con un cuchillo. Los gritos de auxilio alertaron a la vecina que había permitido el acceso, por lo que ésta decidió avisar a su hija, que a su vez llamó a la Policía. Varios testigos vieron salir al sospechoso con el torso desnudo y el cuchillo ensangrentado. EFE