SANTIAGO TARÍN – BARCELONA
.- Una juez de Barcelona ha imputado a cinco mossos d´esquadra por la detención ilegal de un ciudadano rumano, que fue arrestado por error y al que, presuntamente, maltrataron. Los agentes tendrán que comparecer ante la magistrada el próximo día 5 de diciembre para prestar testimonio sobre estos acontecimientos.

Los hechos ocurrieron el pasado mes de julio, aunque hasta ayer no salieron a la luz, avanzados por la cadena Ser. Medios judiciales explicaron a La Vanguardia que el caso se originó por una denuncia sobre un robo con violencia, cuando a una mujer le fue arrebatada una tarjeta de crédito, para lo que el ladrón la golpeó. Luego, el caco intentó usarla en un banco. La cámara de seguridad de la entidad captó unas imágenes del malhechor.

La víctima reconoció a su agresor en un álbum de fotos policial. Con este dato, los mossos detuvieron a un ciudadano rumano y a su compañera sentimental en las proximidades de su domicilio, en la calle Ausias March de Barcelona. Ahora bien, en un segundo reconocimiento, la testigo dudó y el hombre fue puesto en libertad.

Sin embargo, en el plazo de tiempo entre la detención y su puesta en libertad, el ciudadano rumano asegura que fue maltratado por los agentes. Tanto él como su pareja, siguiendo con su relato, fueron golpeados y maltratados por los mossos, que les llevaron a las dependencias de la comisaría de Les Corts. La mujer incluso asegura que le tiraron del pelo para introducirla en el coche policial que los llevó hasta el recinto. Luego, al quedar en libertad, ambos interpusieron una denuncia contra los agentes.

La titular del juzgado de instrucción número 10 de Barcelona se ha hecho cargo de las investigaciones y ha citado como imputados a cinco miembros de la policía autonómica, dos cabos y tres agentes, que deberán declarar el próximo día 5 de diciembre ante la magistrada. La citación menciona los posibles delitos contra las garantías constitucionales, de detención ilegal y de lesiones. En su relato, el detenido por error – pues parece claro que no tuvo que ver con el robo- añadió que en el coche patrulla uno de los policías le apuntó con su arma. Medios judiciales añadieron que en la causa figuran partes facultativos con descripción de los golpes recibidos, que en el caso del hombre revisten especial gravedad, por cuanto es hemofílico y una hemorragia revestiría peligro.

Las mismas fuentes añadieron que también se está indagando si los policías efectuaron un registro ilegal en la casa de la pareja, pues interpretaron la disposición a colaborar de la mujer como la posibilidad de entrar en el domicilio, donde se buscaron pruebas de las conexión del hombre con el robo, sin que tal actuación mediara una orden judicial a tal efecto.

Portavoces de los Mossos d´Esquadra negaron el hecho de que el ciudadano rumano y su pareja fueran maltratados y agregaron que el hombre estuvo detenido en total unas quince horas, sin que en este plazo de tiempo mediaran malos tratos físicos, amenazas ni mucho menos amenazas realizadas con un arma de fuego. Los mossos agregaron que la detención se llevó a cabo tras la identificación de la testigo, y que cuando ésta perdió fuerza, se le dejó en libertad, y solicitaron el respeto a la presunción de inocencia de los agentes.