TERESA CRUZ. Corresponsal

Aproximadamente 600 menores inmigrantes deberían haberse derivado ya a la Península desde Canarias, conforme al acuerdo alcanzado entre el Gobierno y el Ejecutivo canario, y ratificado en el último Consejo Superior de la Inmigración, ante la situación insostenible que viven las Islas. Sin embargo, en Canarias «sólo hay 40 menores inmigrantes menos».

Así lo destacó ayer en el Parlamento canario la titular de Asuntos Sociales, Marisa Zamora, para quien la situación de los menores extranjeros no acompañados en las Islas «es grave por la llegada continua» de pateras con niños a bordo.

La consejera criticó la lentitud de los traslados y exigió al Ejecutivo central que cumpla sus promesas. «Todas las semanas tiene que haber vuelos regulares hacia la Península, y el Gobierno debe cumplir sus compromisos», dijo Zamora. «Los tiempos en este asunto no los marca el Gobierno de Canarias, sino el Estado, que ante todos aquellos temas relacionados con la inmigración llega tarde y no cumple sus objetivos», añadió.

Los traslados de menores a la Península comenzaron el pasado 5 de octubre no exentos de polémica. El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, acusó a las comunidades gobernadas por el PP de insolidarias por negarse a acogerlos. Según denuncia el Gobierno canario, tan sólo se ha derivado a 40 menores en dos semanas, lejos de las previsiones del Ejecutivo de enviar cada semana a 50.

En la actualidad, en el Archipiélago reside un total de 831 chicos extranjeros, de los que 292 se alojan en la red de cabildos insulares. De ellos, 110 están en la isla de Tenerife; 80, en Gran Canaria; 39, en Lanzarote; 25, en Fuerteventura; 22, en La Palma; ocho, en La Gomera; y otros ocho, en El Hierro. El resto se alberga en centros temporales del Gobierno autónomo, repartidos entre Gran Canaria y Tenerife, y que son precisamente los que deberían haberse enviado a la Península.

Marisa Zamora pidió ayer «continuidad» en las medidas adoptadas por el Gobierno y una mayor implicación de Europa ante este fenómeno. Asimismo, la responsable de Asuntos Sociales puso en duda la afirmación realizada semanas atrás por Caldera, quien auguró «la normalización» del fenómeno antes de finales de año.