De la Vega niega «fisuras» con la UE, aunque admite que «las prioridades no son las mismas»

ABC, 23-09-2006

G. L. A.

MADRID. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, negó ayer que existan «fisuras» o «discrepancias esenciales»entre España y el resto de la Unión Europea para controlar la avalancha de inmigrantes que soporta nuestro país, aunque admitió que los demás «no sufren esa presión» y que, por tanto, «a veces las prioridades no son las mismas». En la misma línea, sostuvo que las discrepancias con Alemania son «de un ministro», pero «no así de la canciller Merkel».

Como pruebas de la «sintonía en las líneas generales» para afrontar el problema de la inmigración, De la Vega destacó que se ha decidido ampliar el presupuesto de Frontex desde los 1,5 millones de euros actuales a 285, y que hay acuerdo para poner en marcha un sistema integral de vigilancia europea, así como un protocolo de gestión de las fronteras marítimas. También anunció que el día 29 se reunirán los ministros de Exteriores de los ocho países que constituyen la frontera sur de Europa y la próxima aprobación de una campaña de información en Senegal para advertir de los peligros de la inmigración ilegal.

En el ámbito de las decisiones estrictamente nacionales, el Gobierno ha aprobado incluir en los Presupuestos para 2007 una partida de más de 300 millones de euros para inmigración. Además, con carácter inmediato, acordó aplicar el Fondo de Contingencia para destinar 15,7 millones a financiar los gastos derivados de las repatriaciones y otros 9,8 millones para sufragar operaciones para la acogida de inmigrantes.

Mientras tanto,en la ciudad finlandesa de Tampere, el titular de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, que fue el último de los tres representantes españoles en abandonar el consejo europeo de Interior y Justicia, quitó importancia a las críticas que ha recibido el ejecutivo español por parte del conjunto de miembros de la Unión Europea y de las propias instituciones comunitarias, informa Enrique Serbeto.

Aguilar dijo que no consideraba que hubiera sido un consejo de ministros infructuoso para España, puesto que «no estamos aquí pidiendo nada», aunque la víspera había dejado claro en declaraciones a una agencia británica que el objetivo del Gobierno en esta reunión era «dinero, medios y medidas conjuntas concretas». López Aguilar repitió la tesis de que la llegada de cayucos no tiene relación con el «efecto llamada».

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