VITORIA. DV. El consejero de Vivienda y Asuntos Sociales, Javier Madrazo, reiteró ayer la disposición del Gobierno Vasco a acoger a un número de inmigrantes procedentes de Canarias, si bien condicionó dicha ayuda a que el Ejecutivo central permita la regularización de los sin papeles para propiciar su integración laboral y social.

Madrazo negó que el principal escollo que está retrasando la firma del protocolo de acogida con Madrid sea el cupo de inmigrantes que serán trasladados desde Canarias sino que, tal y como indicó, el debate con el Gobierno del Estado está centrado en las condiciones de acogida.

«El Gobierno de Zapatero plantea que vengan aquí con una orden de expulsión, los acojamos durante 15 días, les demos 60 euros y los dejemos en la calle», indicó el titular de Asuntos Sociales que, por el contrario, defendió el modelo del Gobierno Vasco que aboga por una acogida con garantías y por regularizar su situación para evitar que se vean abocados a depender de las ayudas sociales o de la economía sumergida.

Mercado de trabajo

La opinión del secretario de Organización del PSOE, José Blanco, de que el mercado de trabajo ya no puede absorber a más inmigrantes no es compartida por Madrazo, que no dudó en señalar que Euskadi necesita el trabajo de los inmigrantes en distintos sectores como la construcción, la pesca, la hostelería, la industria o el servicio doméstico, entre otros. Aunque no adelantó qué resquicio legal puede servir para posibilitar la regularización de los ilegales, Madrazo sí recordó que hace unos meses se abrió un proceso de regularización.

Pese a que tanto el Gobierno de Zapatero como el PP han coincidido en que no haya nuevas regularizaciones masivas, el consejero vasco de Asuntos Sociales manifestó su confianza en que el Ejecutivo central acepte las condiciones que permitan ratificar el protocolo de acogida.

Unas condiciones que, tal y como indicó, se harían extensivas no sólo a los inmigrantes procedentes de Canarias sino también a los que ya residen en Euskadi. Recordó que el Gobierno Vasco tiene un instrumento importante con la red Heldu para contribuir a que los ilegales puedan regularizar su situación.

Madrazo reclamó al Gobierno de Zapatero que «pacte» su política de inmigración con las comunidades autónomas al tiempo que criticó que limite la búsqueda de consenso al PP y la Unión Europea mediante lo que calificó de políticas de inmigración «represivas y defensivas».

Por su parte, el diputado general de Álava, el popular Ramón Rabanera, criticó que el Gobierno Vasco todavía no se haya dirigido a las instituciones forales cuando, tal y como indicó, «las residencias y recursos para atender a estos inmigrantes, en el caso de que sean acogidos en Euskadi, son competencia foral».