Un conato de motín en el centro de extranjeros de El Matorral de Fuerteventura se saldó el pasado martes con cuatro policías heridos y varios inmigrantes lesionados. La reyerta se produjo en una de las instalaciones de retención de clandestinos más abarrotada de las islas, en la que se hacinan más de 1.400 subsaharianos y a la que se siguen trasladando extranjeros.

El motín comenzó sobre las 19.00 horas cuando los 700 extranjeros de uno de los módulos aguardaban la cola para cenar. Al parecer, uno de los acogidos pretendía cenar dos veces y se encaró con el ‘chairman’, un inmigrante que hace de intermediario entre clandestinos y policías. Uno de los agentes intentó defender al ‘mediador’ y de inmediato se vio rodeado de un nutrido grupo de inmigrantes en actitud amenazante. El funcionario pidió entonces ayuda a sus sietes compañeros y comenzó la trifulca.

Traslados

Según el comisario jefe de la Policía Nacional Jesús Redondo, los desórdenes quedaron controlados «enseguida», aunque cuatro de los agentes sufrieron lesiones leves y dos de ellos tuvieron que acudir al Hospital de Fuerteventura. La delegación del Gobierno ha intentado disminuir la tensión allí con el traslado de unos 300 clandestinos a instalaciones de la península.

Ayer, el ministro de Trabajo, Jesús Caldera confirmó en el Congreso que el Gobierno propondrá en el Consejo Superior de Política de Inmigración el traslado a la península de parte de los 750 menores indocumentados internos en las islas. Caldera, que reconoció los problemas legales para el envío de los adolescentes – bajo la tutela de Canarias – , dijo que el Ejecutivo, ante la «situación excepcional» en las islas, se hará cargo de la «atención y acogida» de los menores.

Por otra parte, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, escribió ayer una carta a los jefes de Estado y de gobierno de la Unión Europea para exigirles «solidaridad» con España ante la avalancha de inmigrantes. Para Durao Barroso la actual misión de Frontex (Agencia Europea de Control de Fronteras) en las Canarias «debe ser incrementada».

Mientras tanto, continúan las llegadas. 188 ‘ilegales’ – siete menores – alcanzaron las islas ayer a bordo de tres cayucos, dos en Tenerife y uno en El Hierro. Además, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, impuso ayer a los tripulantes del pesquero ‘Francisco y Catalina’ la medalla al Mérito Civil por salvar, el pasado 16 de julio en Malta, a 51 inmigrantes que se encontraban a la deriva.