Un grupo de inmigrantes del Centro de Internamiento de Extranjeros de El Matorral, en la isla canaria de Fuerteventura, protagonizó un motín la noche del pasado martes, después de que uno de los internos se enfrentara al ‘jefe’ del grupo. Durante la reyerta resultaron heridos cuatro policías. El conato de motín en el centro de extranjeros de Fuerteventura se saldó el pasado martes con cuatro policías heridos y varios inmigrantes lesionados. La reyerta se produjo en una de las instalaciones de retención de clandestinos más abarrotada de las islas, en la que se hacinan más de 1.400 subsaharianos y a la que se siguen trasladando extranjeros recién llegados.


El motín comenzó cuando los 700 extranjeros de uno de los módulos aguardaban la cola para cenar. Al parecer, uno de los acogidos pretendía cenar dos veces y se encaró con el
chairman
, un inmigrante que hace de intermediario entre los clandestinos y los policías.


Uno de los agentes intentó entonces defender al mediador y de inmediato se vio rodeado de un nutrido grupo de inmigrantes en actitud amenazante. El funcionario pidió entonces ayuda a sus sietes compañeros y comenzó la trifulca.


Según informó el comisario jefe de la Policía Nacional en Puerto del Rosario, Jesús Redondo, los desórdenes quedaron controlados “enseguida”, aunque cuatro de los agentes que custodiaban el módulo donde se produjo el altercado sufrieron lesiones leves en forma de rozaduras. Dos de ellos tuvieron que acudir al Hospital General de Fuerteventura para ser asistidos de estas heridas, pero posteriormente continuaron con su servicio en el centro.


Jesús Redondo aseguró que “no es normal que ocurran estos hechos”, que achacó a lo “apretados” que han estado en los últimos días los internos de El Matorral. La delegación del Gobierno ha intentado disminuir la tensión por el hacinamiento en este centro con el traslado inmediato de unos 300 clandestinos a otras instalaciones.