Santa Cruz de Tenerife
La consejera canaria de Empleo y Asuntos Sociales, Marisa zamora, afirmó hoy que la posición del ministro Jesús Caldera en relación a la asunción por el Estado de parte de los casi 700 menores inmigrantes acogidos en Canarias es “un avance”, aunque el Gobierno autonómico va a pedir “algo más”.
Zamora reveló que ayer tuvo una conversación telefónica con el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales en la que éste le anunció que Canarias se quedará con un cupo de entre 250 y 300 menores, mientras que el resto se repartirá entre el Estado y las comunidades autónomas.

Esa es la propuesta que llevará Caldera a la próxima reunión del Consejo Superior de Política de Inmigración, según dijo Zamora a los periodistas. Pero el Gobierno de Canarias, aunque ve avances en esta posición, mantiene su demanda de que el reparto de los menores se realice en función de la población de cada comunidad autónoma, el territorio y el número de menores acogidos.

En su opinión, Canarias no depende de la buena voluntad de las otras comunidades autónomas para el reparto de los menores, porque “es un problema de Estado, no de las comunidades autónomas, y la única que está sufriendo el problema es Canarias como frontera sur de Europa”. Agregó la consejera que la Convención de Derechos del Niño de la ONU recoge que los estados “no se pueden inhibir” de su competencia de prestar atención a los menores.

Subrayó que Canarias no tiene “una capacidad de acogida ilimitada” ni puede improvisar recursos, y puso como ejemplo que el fin de semana pasado llegaron 40 nuevos menores extranjeros a las islas. Además, agregó, no se ha avanzado en el reagrupamiento familiar de menores, ni se realizan averiguaciones para ver de dónde proceden y devolverlos con sus familias.

“Tenemos más de 80 chicos de Senegal perfectamente identificados”, aseguró la consejera, y demandó que el inspector enviado por Senegal a identificar a sus ciudadanos adultos vaya también a los centros de menores a identificarlos. Marisa Zamora afirmó que el Gobierno español “siempre ha llegado tarde a las decisiones que toma” y repasó algunos compromisos que en su opinión no se han cumplido.

Citó entre ellos que se prometieron repatriaciones de inmigrantes a los países de origen y sólo se devuelve a un 8 por ciento, y se anunció que nueve países iban a participar en la vigilancia de fronteras del dispositivo Frontex y sólo hay tres.