bruselas. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, respondió ayer a las demandas españolas al pedir a los estados miembros que “intensifiquen” su ayuda a España para el control del problema “urgente y dramático” que constituye la inmigración ilegal.

Durao Barroso envió ayer una carta a los jefes de Estado y de Gobierno de los Veinticinco para demandarles que contribuyan con más barcos y aviones a la misión en las islas Canarias de la Agencia de Control de Fronteras (Frontex). Barroso reclama a los estados miembros “solidaridad” para asistir a los países del sur más afectados por la inmigración y, aunque admite que los medios enviados hasta ahora son un “ejemplo concreto” de esta colaboración, pide que “aumenten y se intensifiquen, en particular para España”.

Además, el presidente de la CE destacó que desde la puesta en marcha de la Frontex en Canarias el “problema” de la llegada de flujos de inmigrantes “no se ha aminorado”, lo que pone de relieve que “los medios que en un principio pensábamos que podrían ser suficientes no lo son en estos momentos”.

El presidente del Ejecutivo comunitario ha decidido lanzar este nuevo llamamiento a los 25 para que ayuden a España – y también a Italia y Malta, receptores de la inmigración africana – porque “está en juego la solidaridad de los estados miembros”. Barroso alerta en su misiva de que las avalanchas podrían ocurrir en el futuro en otros países de la UE.

discrepancias Por otro lado, el comisario europeo de Libertad, Seguridad y Justicia, Franco Frattini, pidió mayor severidad legal contra quienes den empleo a inmigrantes indocumentados en la UE y se pronunció en contra de las “regularizaciones masivas”. El dirigente comunitario explicó que este tipo de procesos, como el llevado a cabo por España en 2005, “convierten una violación de las leyes del Estado en una residencia legítima y permanente”. Las “regularizaciones masivas”, en su opinión, “envían una señal seductora que favorece la llegada y establecimiento ilegal” de clandestinos.

Por el contrario, el comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, afirmó en Madrid que no comparte que las regularizaciones tengan un efecto llamada y defendió que cada país europeo regularice cada año a varios miles de inmigrantes. Además, apostó por hacer una oferta de reinserción a los subsaharianos bloqueados en Canarias para que vuelvan a sus países. >agencias