PSE, Sumar y Podemos reprochan al PP su «discurso de odio» con la inmigración

Pradales y Otxandiano defienden el carácter «acogedor» de la sociedad vasca y aseguran que «hay que seguir atrayendo» mano de obra

El Correo, Octavio Igea, 22-04-2024

La realidad social de Euskadi no puede entenderse hoy por hoy sin tener en cuenta el fenómeno de la inmigración. Los extranjeros, que suponen ya el 12% de los ciudadanos del territorio, están sosteniendo los datos de población desde hace años y contribuyen a el sistema de pensiones y a sostener la natalidad. El tema ha enfrentado en el debate electoral de EL CORREO a los candidatos de PSE, Sumar y Podemos Eneko Andueza, Alba García y Miren Gorrotxategi con el del PP, Javier de Andrés, al que han acusado de mantener un «discurso de odio» por asegurar que la RGI supone un «efecto llamada» y que las políticas de integración del Gobierno vasco «son un fracaso» y que «la inmigración sin control no es una solución».

La que ha abierto el fuego en este bloque ha sido Amaya Martínez (Vox), que ha defendido que su formación «en ningún caso rechaza» toda la inmigración, «solo la ilegal que se ha convertido en un gravísimo problema». A su juicio, la causa son «las ayudas del PNV», «la colaboración del PSE» y que el PP «no se esté oponiendo». «Por su puesto que debe haber inmigrantes, pero no todos», ha dicho.

Cuando De Andrés ha insistido después que el paro de los inmigrantes es en Euskadi «más alto que en otros territorios», Andueza le ha echado en cara que «esté patinando» y ha reivindicado a la gente «que se juega la vida por un futuro mejor». En ese sentido, ha recordado que las nuevas leyes de regularización permitirán ofrecerles «más derechos laborales» a gente «como la que cuida a nuestros mayores». «Entran como pueden», ha añadido Miren Gorrotxategi, que ha defendido que «quienes odian la inmigración odian Euskadi» y ha pedido que a los recién llegados se les acoja «con dignidad, no con racismo». Alba García ha insistido en que «nadie es ilegal» y ha pedido revisar cuestiones como «la presión policial a los manteros» y la «dramática» situación de los menores no acompañados.

El candidato de EH Bildu, Pello Otxandiano, ha advertido que en la cuestión de la inmigración «nos jugamos la cohesión social» y que el flujo de llegadas «se va a mantener». Ha pedido «no comprar» el discurso «de la extrema derecha pese a que haya tentación». También ha reclamado que Euskadi cuente con la capacidad de hacer nuevas políticas para garantzar que el territorio sea «una nación plural y abierta». Por su parte, Imanol Pradales se ha marcado el reto de «seguir atrayendo talento» del extranjero, y también ciudadanos no cualificados. «Los necesitamos para construir país y rejuvenecerlo», ha dicho el aspirante del PNV.

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