El fútbol no aprende y el racismo parece seguir presente jornada tras jornada. Ayer se conoció que la UEFA ha abierto un expediente disciplinario contra el FC Barcelona por los lamentables gestos de sus aficionados durante el choque con el PSG. Desde francia denunciron la vergonzosa actitud de algunos aficionados culés que realizaron saludos nazis e insultos racistas y ahora el club podría enfrentarse a una dura sanción.Pero, por desgracia, estos actos parecen no tener fin y ayer volvió a repetirse en Son Moix.

Ocurrió durante la celebración del gol de Aurélien Tchouaméni en Mallorca cuando un aficionado, que parece menor de edad, hizo varios gestos de mono mirando a los jugadores del Real Madrid. Además, como se puede ver en las imágenes de Movistar, el joven tiró una botella que luego le dan al árbitro. Un nuevo incidente que no debería verse en un partido de LaLiga.El incidente ocurrió cuando Vinicius aún no estaba en el campo y que al que después dedicarían una sonora pitada. Cabe recordar que temporada pasada ya se profirieron insultos racistas contra el brasileño desde las gradas del estadio del Mallorca. Recibió cánticos de “puto mono” por parte de un aficionado del seguidor bermellón. Un asunto que acabría en los tribunales.

Habrá que esperar si el club o LaLiga tomas cartas en el asunto contra el lamentable incidente de ayer.