Aunque el Rayo Majadahonda anunció el miércoles que no iba a recurrir la sanción de dos partidos impuesta por la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) a Cheikh Sarr, el castigo al portero no ha sentado nada bien en la entidad majariega. Si ya tras conocer la resolución del Comité de Competición criticó la falta de «empatía» hacia el club, que el 30 de marzo abandonó su partido contra el Sestao River por insultos racistas a Sarr, este sábado sus jugadores hicieron una sentada de protesta al inicio de su partido contra la Ponferradina de Primera RFEF.

Antes de comenzar el choque, los jugadores del conjunto local posaron con una pancarta de apoyo a Cheikh Sarr, presente primero en el césped durante el calentamiento y después en la grada del Cerro del Espino: «Un equipo, una familia con Cheik, contra el Racismo».A este lema se unió otro gesto tras el pitido inicial del árbitro, pues los jugadores del Rayo Majadahonda, que sacaron de centro, no jugaron la pelota durante los primeros treinta segundos del partido. Una protesta que respetaron sus compañeros de la Ponferradina.

Derrota y tres puntos de sanción
El miércoles el club se quejó en un comunicado oficial de que la RFEF y el Juez Único de Competición no habían mostrado con ellos la empatía que afortunadamente sí habían tenido con su jugador, aplicándoles «una dura sanción». Al club madrileño le impusieron la derrota por 3-0 en el partido y tres puntos de sanción.«Fue una decisión tomada de forma conjunta, y lo haríamos una y mil veces más con tal de proteger a nuestro jugador y mantener los valores que han predominado en toda la historia de nuestro club», explicó en su momento el Rayo Majadahonda. «Con nuestra acción entendemos que estamos iniciando un camino que deberían de seguir otros por el bien de este deporte que tanto queremos, llamado fútbol».