La sección de baloncesto del Fútbol Club Barcelona, flamante campeón de la Liga Endesa de baloncesto tras imponerse por un contundente 3-0 en la serie final al Real Madrid, ha denunciado ante la ACB los insultos racistas recibidos por su jugador James Nnaji en las inmediaciones del madrileño WiZink Center en la previa del tercer y a la postre definitivo partido.

El club azulgrana, a través de un comunicado oficial, ha condenado «enérgicamente» lo sucedido en la puerta de acceso al pabellón de la calle Goya, y ha reclamado «una respuesta firme y ejemplar» a la patronal de los clubes .

Antes del partido un pequeño grupo de aficionados madridistas recibió entre insultos a la expedición del Barça. Entre los jugadores azulgranas, que tuvieron que escuchar gritos de «ladrones» y similares tras la polémica arbitral del segundo partido, uno de los peor parados fue Nikola Mirotic debido a su pasado en el Real Madrid. Al jugador de origen montenegrino le dedicaron algunas lindezas del estilo de «rata apestosa».

Aunque sin duda la peor parte de la censurable situación vivida en el acceso al recinto deportivo se la llevó el pívot nigeriano Nnaji, al que le dedicaron gritos racistas de «negro de mierda» al bajarse del autobús de los visitantes.

El club catalán y vigente campeón de la Liga Endesa explica que ya ha puesto en conocimiento de la ACB los hechos, para que actúe en consecuencia.

Jasikevicius, firme contra el racismo
Ya tras el partido, en la sala de prensa el entrenador del Barça, Sarunas Jasikevicius denunció lo vivido en la previa: «Es una cosa lamentable, no puede ser. Escucho mucho hablar de Vinicius y ahora tenemos que hablar sobre lo que pasa, porque esto tiene que parar ya».

Horas después del comunicado azulgrana la ACB dio confirmación de recibo con la publicación de una nota oficial en la que aseguró haber trasladado los vídeos existentes sobre lo ocurrido en las puertas del WiZink Center a la Comisión Antiviolencia.

A la vez reafirmó su compromiso «contra el racismo, la xenofobia, la violencia y la intolerancia en el deporte».