Amnistía Internacional (AI)ha conseguido una sentencia favorable para los cuatro polizones originarios de Ghana que, según denunció AI de Castellón, llegaron el 9 de noviembre de 2005 al puerto de Castellón en el buque Jolly Turchese, informaron fuentes de Amnistía Internacional.

Según las mismas fuentes, “ninguno de ellos recibió la preceptiva asistencia letrada ni de intérprete ni se les ofreció la posibilidad de solicitar asilo, siendo en definitiva devueltos a su país de origen sin haberse observado el procedimiento legal de expulsión”, es decir de forma totalmente irregular.

Así, recordaron que esa vía de hecho de la subdelegación del Gobierno en Castellón fue recurrida por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) del País Valenciano a petición de Amnistía Internacional ante el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número dos de Castellón.

Recurso
Según unas declaraciones de responsables de la organización humanitaria, el pasado 23 de febrero se notificó finalmente sentencia en virtud de la cual “se estima el recurso interpuesto por vulneración del derecho fundamental de defensa”, apuntaron.

La sentencia, aseguraron, “da la razón a Comisión Española de Ayuda al Refugiado y reconoce que la actuación llevada a cabo por la Subdelegación del Gobierno en Castellón y de la Delegación del Gobierno en Valencia constituye una vulneración del derecho fundamental a la defensa y asistencia letrada de los polizones, lo que ha determinado la declaración de nulidad de la actuación de la Subdelegación del Gobierno”.

Esta sentencia, señalaron las citadas fuentes de Amnistía Internacional, “implica que de ahora en adelante deberá prestarse asistencia letrada en los puertos españoles”, concluyeron.