La necesidad de controlar los flujos migratorios, pero sobre todo de promover la integración de los inmigrantes que logran llegar a España está detrás de la propuesta que Juventudes Socialistas de España (JSE), a través de su secretario general Herick Campos, lanzó ayer en Melilla en el acto de clausura del II Foro Euromediterráneo que durante el fin de semana se ha venido desarrollando en la ciudad autónoma bajo el lema ‘Los y las inmigrantes jóvenes: los nuevos ciudadanos europeos’.

Juventudes Socialistas va a proponer al Gobierno central la creación de una mesa por la convivencia y la integración de los inmigrantes, una plataforma institucional en la que tengan cabida las comunidades autónomas y los colectivos juveniles con el objetivo primordial de acabar con la exclusión a la que en muchos casos se ven sometidos quienes dejan sus países en busca de un futuro mejor.

Campos intervino en la clausura de las jornadas en las que han participado casi un centenar de personas entre miembros de la Ejecutiva socialista, parlamentarios europeos y miembros de Juventudes Socialistas, junto al eurodiputado Joan Calabuig, el secretario de relaciones con las oenegés de la Ejecutiva Socialista, Pedro Zerolo, y el secretario general del PSOE local, Dionisio Muñoz.

Conclusiones

Pero antes, Zerolo tuvo la oportunidad de reunirse con representantes de varias entidades locales que trabajan con los inmigrantes con las que conoció de primera mano la situación del fenómeno migratorio en Melilla.

Tras esto, la secretaria de Bienestar Social de JSE, Maite Carnero, dio a conocer las conclusiones del Foro en el que se puso de manifiesto la necesidad de conocer bien el fenómeno para saber cómo actuar desde un país receptor de inmigrantes como es España en el que el número de jóvenes se ha multiplicado por tres en los últimos años y donde son víctimas de contratos más precarios y con sueldos más bajos que los españoles.

Carnero señaló la necesidad de apostar por la integración con una acción transversal que propicie la plena integración del inmigrante sobre la base del respeto y la tolerancia y constató que hacen falta más recursos para atender a un colectivo vulnerable como éste, especialmente a las mujeres y los menores, y la implicación para ello de todas las instituciones y comunidades autónomas. Por último, se habló de la necesidad de un sistema educativo integrador que apueste por los valores.