La junta directiva de la Asociación de Empresarios de Alojamientos Turísticos de Las Palmas ha expresado su preocupación por la incertidumbre que advierte ante el inicio de la temporada de invierno, sujeta a comprar de última hora, cuyas reservas oscilan de momento entre un 25 y un 30 % las plazas que se ofertan.

En un comunicado remitido este lunes, la Asociación, integrada en la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo (FEHT) de Las Palmas, ha señalado además que aunque el verano ha sido esperanzador, son muchos los complejos cerrados, que han aprovechado estos meses para modernizar sus instalaciones con miras a una inminente mejora de las ocupaciones del sector.

En su última reunión, la junta directiva también abordó el deficiente estado de las infraestructuras de la zona turística, así como la falta de recursos públicos para su adecuación, e hizo especial hincapié en el «depauperado» estado de los centros comerciales turísticos de San Bartolomé de Tirajana, el abandono de las playas y la ausencia de control frente al «botellón».

Para la asociación, se trata de problemas «casi enquistados en el tiempo», al igual que el de la proliferación del alquiler ilegal en los establecimientos turísticos, sobre el que lamenta que aún no haya sido solucionado por la Administración, destaca la nota.

La problemática de la inmigración fue otro de los asuntos tratados, según el comunicado.

Satisfacción por las ayudas públicas
En cuanto a las ayudas públicas, la asociación mostró su satisfacción por las subvenciones propiciadas por el Gobierno de Canarias, si bien ha advertido que la especial estructura de las empresas del sector (Comunidad de Propietarios y Comunidades de Explotación) supone un dificultad añadida para acceder a ellas.

Los miembros de la junta directiva criticaron a las corporaciones locales de las zonas turísticas por mantener la presión fiscal pese a la crisis.

Sobre el futuro destino de la instalación portuaria de la zona de El Pajar (Puerto de Santa Águeda), la asociación ha abogado por la excelencia turística de la zona y que el destino portuario tenga por objetivo amarres para embarcaciones de recreo, y no para grandes cruceros.

Los recientes problemas en la facturación de la luz, donde se visualizaron errores por exceso en la misma, al basarse en estimaciones erróneas, también fue otro asunto a tratar, así como la huelga del servicio de «handling» en el Aeropuerto de Gran Canaria