Empatía desde un campo de refugiados en Alsasua

Diario de Navarra, Josu Ochoa Garayoa, 16-05-2021

Invisibles como personas, anónimos como amenazas, escondidos como delincuentes, ocultos como verdades. La reflexión que lleva aparejada la fotografía de un emigrante senegalés que esconde su rostro bajo una chaqueta de chándal antes de lanzarse a la travesía más peligrosa de su vida refleja de manera impoluta la tesitura que viven miles de seres humanos.
En un momento de pandemia, donde la esencia del aprendizaje común y la mezcolanza respetuosa “se han dinamitado”, el drama que de un campo de refugiados no es solo contenido de unas líneas en periódico de domingo. “A través de una actividad que se llama ‘Ongi etorri a personas migrantes y refugiadas en Sakana’, damos la bienvenida a todos, ya que son conceptos diferentes. No todo migrante es un refugiado”. Las palabras de Begoña Cestau, responsable del Servicio de Interculturalidad Anitzartean de la Mancomunidad de Sakana, apostaban las bases de lo que fue la jornada de ayer.
MÚLTIPES PRISMAS
Pero no se trata de pisar Grecia para darse cuenta de lo que ocurre. No. El reto consistió en adentrarse en el campamento de refugiados fabricado dentro del centro cultural Iortia de Alsasua. Una vez en su interior, cada persona tuvo la oportunidad de moverse por la sala para entender la verdadera esencia de lo que se trataba de explicar.
Desde material antirumor para concienciar sobre el efecto negativo que despiertan este tipo de conductas (una vez ‘roto’ el rumor, los participantes podían llevarse consigo una flor natural); hasta un trivial creado por alumnos de Bachiller del instituto de Alsasua; o un taller de Derechos Humanos, donde los más pequeños pudieron crear sus propias chapas alrededor de la temática. En este contexto, el Servicio de Interculturalidad Anitzartean de la Mancomunidad de Sakana, Sakana Harrera Arana y el grupo de Teatro Tarima Beltza (diseñadores de la jornada) tampoco quisieron olvidarse de las personas migradas en la localidad. De ahí que dispusieran de un espacio para compartir sus complicadas experiencias de vida. ¿Qué llevarías en la maleta si tuvieras que dejar tu casa de repente? ¿Cómo darías de comer a tus hijos sin dinero ni recursos?
Preguntas difíciles que para Begoña Cestau son tan necesarias como reales. Y como chispa de energía, una actuación danzas a mediodía o una función teatral por la tarde, cuyos fondos se destinaron íntegramente a Zaporeak (ofrece comida digna a las personas refugiadas que llegan a Europa).
‘CONGELADAS’ EN EL TIEMPO
Y junto a la presencia del grupo Helpna (bomberos voluntarios para emergencias humanitarias de Navarra), la exposición de Fernando García Arévalo. ‘En lo ancho del Estrecho, 25 años, 25 historias’. Un elenco de fotografías tomadas en puntos tan distintos como el Magreb, Oriente Medio o la propia Península ibérica. Instantáneas para reflexionar y entre las que se incluía la vista de la primera patera cruzando Gibraltar. Era 1992 y Fernando la captó después de permanecer mes y medio acampado dentro de un 127. “La espalda se me quedó acoplada al asiento”, bromeaba ayer no sin poner de relieve la ‘bomba’ que se estaba cocinando.

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