Biden cumple su promesa contra el racismo sistémico en EE UU

El presidente firma órdenes ejecutivas para garantizar la igualdad de las minorías y espera que el Congreso avale una legislación duradera que recoja ese espíritu

Diario Vasco, MERCEDES GALLEGO Nueva York, 27-01-2021

La participación récord de afroamericanos en las elecciones pasadas contribuyó a la victoria de Joe Biden y proporcionó a los demócratas Estados insólitos como Georgia, que les dio el control del Senado. A los hispanos les deben otro Estado inesperado, Arizona, así como la victoria de Nevada. La justicia racial y la protección de minorías no es solo una deuda moral para Biden, sino una obligación.

Este martes utilizó su herramienta más socorrida en esta primera semana de gobierno, las órdenes ejecutivas, para cumplir con sus promesas de avanzar en la igualdad de oportunidades y luchar contra el racismo sistémico. El paquete es solo el principio, porque la labor involucrará a todas las carteras de gobierno, desde Vivienda, que tendrá que eliminar las prácticas discriminatorias en la adjudicación de vivienda pública, a Justicia, a la que ha ordenado eliminar el uso de prisiones privadas.

La lucha contra el racismo beneficiará también a los nativos americanos, con los que el Gobierno abrirá nuevas conversaciones, y a los asiáticos, contra quienes los actos de violencia e intolerancia se han recrudecido desde el comienzo de la pandemia, a la que Trump siempre se refería como «el virus chino».

«El país está listo para cambiar y el Gobierno también», afirmó Biden. Ese momento se lo atribuye a la muerte de George Floyd, cuya agonía de 8 minutos y 46 segundos «abrió los ojos de muchos estadounidenses y del mundo», aseguró. «Fue una rodilla en el cuello de la justicia que no olvidaremos jamás, porque marcó un punto de inflexión en la lucha por la justicia social de este país».

Lo que encontraron al abrir los ojos fue «una profunda desigualdad racial y un sistema racista que ya no podía ser ignorado», reflexionó. La pandemia se ha cebado con las minorías y ha dejado más claro, si cabe, el sistema de injusticias sociales en el que viven. Y no solo porque los afroamericanos tienen tres veces más posibilidades de morir de covid que la población general. Los grupos de color suponen el 40% de todos los trabajadores médicos esenciales que han luchado en el frente hospitalario. Los que no tenían trabajo están aún peor: uno de cada diez parados es afroamericano y uno de cada once, hispano.

Recuperar el ‘Obamacare’
Los líderes afroamericanos coincidieron este martes en que las órdenes ejecutivas son demasiado frágiles para lograr el cambio vital que necesitan, como ha demostrado el Gobierno de Trump, que deshizo el legado de Obama sin el menor esfuerzo. Las órdenes ejecutivas se firman de un plumazo y se deshacen de la misma manera. Por eso Biden necesitará ayuda del Congreso para trasladar ese espíritu a una legislación duradera que sobreviva a su mandato.

«No prometo que podemos cambiarlo mañana pero puedo prometer que vamos a empezar hoy mismo a atajar los problemas en cada rama de gobierno para eliminar el racismo sistémico», dijo el nuevo presidente.

Entre las medidas de las que se beneficiarán las minorías está la de restablecer la bolsa de seguros médicos subvencionados que se creó con la Ley de Asistencia Sanitaria Asequible, el ‘Obamacare’. En el punto de mira de los republicanos, que la veían como el principio de la «medicina socializada», fue una de las leyes más despedazadas durante el mandato de Trump, obsesionado con desmantelar el legado de su predecesor.

Biden, que fue parte del esfuerzo de Obama como su vicepresidente, piensa retomar el trabajo allí donde lo dejó hace cuatro años. El portal de HealthCare.gov volverá a abrirse a nuevas inscripciones de pólizas subsidiadas, pese a que normalmente la contratación de seguros está restringida a las últimas seis semanas del año. La pandemia justificará esta nueva oportunidad, aunque a estas alturas Biden no necesita excusas.

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