Un incendio ha destruido esta madrugada una quincena de carpas en un campo de refugiados de la isla griega de Samos, en el archipiélago del Dodecaneso, sin que hubiera que lamentar víctimas, ha informado el Ministerio griego de Migración.

Por ahora se desconocen las causas del fuego, que se ha declarado en la parte exterior del campo de Vathy y no ha llegado a afectar la estructura organizada, aunque sí ha destruido una quincena de carpas. Unas 150 personas se han quedado sin cobijo.Según ha declarado el alcalde de Samos oriental, Yorgos Stanzos, el incendio se ha desatado en torno a las cuatro de la madrugada y se ha propagado con gran rapidez, pero la policía y los bomberos han podido evacuar el lugar y evitar así que hubiera heridos. En el campamento de Samos viven actualmente unas 4.200 personas.«Está claro que el campo de Vathy no es un lugar seguro», ha subrayado Médicos Sin Fronteras (MSF), cuyos equipos ya se han movilizado para atender las necesidades de los afectados.

Hace dos meses, en MoriaEn la madrugada del 9 de septiembre otro fuego destruyó completamente el campo de Moria, en la isla de Lesbos, donde vivían hacinados más de 10.000 migrantes.El incendio se produce tan solo tres días después del gran terremoto de magnitud 6,8 en la escala de Richter que sacudió el Egeo oriental, donde la actividad sísmica continúa a día de hoy, aunque con temblores de baja intensidad.A pesar de que el epicentro tan solo se encontraba a poco más de una decena de kilómetros de Samos –a una profundidad de diez kilómetros en el mar–, en la isla solo hubo que lamentar dos víctimas mortales y nueve heridos, mientras que los mayores daños se produjeron en la ciudad turca de Esmirna, situada a unos 60 kilómetros, donde hasta el momento se han recuperado 69 cadáveres.