Abascal se estrena en Euskadi

Vox logra un escaño por Álava y por primera vez consigue representación en el Parlamento Vasco, como ya lo ha hecho en la mayoría de autonomía

Diario Vasco, A. LERATE, 13-07-2020

El Parlamento Vasco dejará de ser una excepción en el mapa político español. El escaño obtenido por Vox homologa a la Cámara vasca con buena parte de las instituciones autonómicas del resto del país, donde la ultraderecha ya es una opción política consolidada e incluso con responsabilidades de gobierno. Es obvio que con un solo escaño la capacidad de influencia de Vox en la política vasca va a ser muy limitada, pero más evidente es aún que su mera presencia en un entorno que hasta ahora había sido tan hostil para la ultraderecha constituye un hito de enorme carga simbólica para la formación que lidera Santiago Abascal.

Abascal dice que Vox será «una voz que planteará una oposición al autonomismo radical»
Abascal dice que Vox será «una voz que planteará una oposición al autonomismo radical»
EL DIARIO VASCO
Los resultados electorales parecen haber dado la razón a quienes pronosticaban que la campaña de acoso de la que ha sido objeto el partido ultraderechista en las últimas semanas era gasolina para sus intereses. La pedrada que recibió una de las diputadas de Vox en uno de los tumultuosos actos electorales de la formación de extrema derecha se ha revelado como un potente activo a la hora de recabar apoyos. La proyección que alcanzó la agresión consiguió precisamente todo lo contrario de lo que perseguían los energúmenos que la ejecutaron. No hay propaganda electoral capaz competir con la imagen real de un rostro femenino ensangrentado por la intransigencia. La llegada de Vox a la Cámara gasteiztarra confirma que la sociedad vasca navega ya en las mismas corrientes que zarandean a la política del resto del continente. La ultraderecha forma parte del paisaje político contemporáneo en todo Europa y no parece que eso vaya a cambiar en los próximos tiempos. Guste o no guste, la excepción vasca que tanto ha querido alimentar el nacionalismo radical con sus proclamas contrarias a la ultraderecha ya ha dejado de existir.

Parlamentaria con EGA
La representante de Vox será la cabeza de lista por Álava, Amaya Martínez, que regenta con su marido la armería La Jungla en el barrio vitoriano de Adurza desde hace treinta años. Antes de unirse al partido de Santiago Abascal, esta licenciada en Periodismo de 51 años se había mantenido en la retaguardia política sin ningún tipo de vinculación con otros partidos. «Con el auge del independentismo y del feminismo radical por fin decidió dar un paso al frente», destaca el presidente de la formación en Álava, Daniel Guardiola.

Es madre de una enfermera de 24 años, por lo que ha vivido la crisis de los últimos meses como algo «casi personal» y su indignación por cómo se ha gestionado la pandemia ha protagonizado algunos de sus discursos en campaña. Quienes dieron los primeros pasos en política junto a Martínez destacan que «hablando claro y sin afán de protagonismo» se ha ganado el respeto de sus compañeros de filas hasta comandar la candidatura de Vox. «Cuando nadie nos conocía ella ocupaba puestos de relleno en las listas siendo consciente de que jamás iba a salir elegida. Esa fidelidad y esa valentía por dar la cara por esta organización le ha servido ahora de premio».

A muchos parlamentarios seguro que les sorprende que domina el euskera. «Tiene hasta la acreditación del EGA», apunta el responsable provincial de Vox. «Es una vasca en todos los sentidos, ya que no ha vivido en otro sitio, pero es una patriota que defiende la unidad de España», comentan afiliados del partido.

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