Rumanos y colombianos desbancan a los temporeros originarios de África en Lleida

La Vanguardia, 06-06-2006

. – Maruel, Jordi, Traian y Florín, ciudadanos rumanos, encarnan la imagen del temporero del siglo XXI. Este país, junto con Colombia, es ahora mismo el que más mano de obra aporta para la campaña de fruta en las comarcas de Lleida, hasta el punto de haber desbancado a los trabajadores procedentes de países africanos. Desde ahora y hasta el próximo mes de septiembre las tierras de Ponent productoras de fruta ofertarán más de siete mil contratos.
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Más de la mitad de estos temporeros, alrededor de 4.500, han sido contratados ya en sus países de origen – en una iniciativa promovida por el sindicato agrario Unió de Pagesos, que está dando muy buenos resultados – y el resto serán captados en el mismo territorio o a través del Servei d´Ocupació de Catalunya (SOC) conforme se vaya produciendo la demanda.
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El contrato en origen es el que ha llevado hasta a Alcarràs a los ciudadanos rumanos Maruel, Jordi, Traian y Florín. Es el cuarto año que viajan hasta el Baix Segre, donde trabajarán cuatro meses con el compromiso de regresar a su país una vez expire su contrato. Los cuatro temporeros se muestran encantados con esta oportunidad en una época en la que las cosas están muy mal en su país. “Los precios son similares a los de España, pero los sueldos están por los suelos”, afirma Maurel.
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Los ciudadanos del Este se han ganado a pulso ese puesto destacado que ocupan en la lista de temporeros. Los payeses están satisfechos por el rendimiento de estos trabajadores y cada día son más los que demandan, cuando pueden elegir, mano de obra procedente de Rumanía. Un fenómeno similar se ha dado con los temporeros que llegan de Colombia. Son muchos los ciudadanos de ese país que repiten año tras año en el Baix Segre tras pedirlo también los propietarios de las fincas agrícolas. Joan Josep Vergé, responsable de Unió de Pagesos del área de inmigración, indica que el único problema con la contratación en origen en Colombia es que estos trabajadores necesitan más semanas de trabajo para amortizar su viaje que los que vienen de países del Este, a los que sale a cuenta viajar a España aunque sólo sea con un contrato de un par de meses.
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El pistoletazo de salida de la campaña de la fruta se dará en cuestión de semanas y desde ayer operan ya en el Baix Segre las oficinas móviles del Servei d´Ocupació de Catalunya (SOC). El objetivo de este servicio es facilitar trabajo a los temporeros que han empezado ya a recalar en esas comarcas productoras de fruta en busca de un trabajo. Sólo las personas que tengan la documentación en regla podrán optar, sin embargo, a un contrato.
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Antes de empezar la campaña se han incoado ya nueve expedientes a payeses por contratar a personas sin papeles. Las autoridades advierten, asimismo, que con la contratación en origen la mano de obra que se necesita queda ya prácticamente cubierta, por lo que insisten en el peligro que entraña un efecto llamada como el que se ha producido algunos veranos.
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La secretaria de inmigración de la Generalitat, Consol Prados, anunció ayer, por otra parte, que muy pronto se publicarán las ayudas del Govern para garantizar un techo a esos temporeros.
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