El pleno del Senado ha votado a favor del autorizar el proceso contra Matteo Salvini por el caso de la nave militar Gregoretti. El líder de la Liga fue acusado por el Tribunal de Catania de un delito de secuestro de personas cometido contra 131 inmigrantes. El exministro del Interior les impidió desembarcar de la nave de la Marina militar Gregoretti a finales de julio pasado. La nave fue bloqueada ante el puerto de Augusta (Sicilia) durante cuatro días, hasta su desembarco el 31 de julio. El pasado 20 de enero, una comisión del Senado aprobó ya procesar a Salvini. Entonces, el líder de la Liga, que es senador, había renunciado a su inmunidad para ser procesado y pidió a los senadores de su partido que votaran a favor del juicio.

Esta decisión tuvo en ese momento una motivación claramente electoral, ya que al domingo siguiente, 26 de enero, se celebraban las elecciones regionales en Emilia Romaña, que Salvini consideradas trascendentales. Confiaba en haberlas ganado para condicionar el futuro del gobierno de coalición que preside Giuseppe Conte. Sin embargo, Matteo Salvini perdió esos comicios, interrumpiendo la que consideraba una marcha imparable hacia palacio Chigi, sede de la presidencia del gobierno. Desde entonces, en público el líder de la Liga ha dicho sí al juicio para ser procesado, pero en realidad esperaba evitarlo. De hecho, sus aliados, Forza Italia de Berlusconi, y Fratelli D’ Italia de Giorgia Meloni, presentaron al pleno del Senado un documento que pedía el «no» al proceso del exministro del Interior. La Liga no votó y abandonó el aula. Además, la prestigiosa abogada, exministra y senadora de la Liga, Giulia Bongiorno, había aconsejado al exministro del Interior no empujar por el sí al proceso.

«Agresión política»
En cualquier caso, Salvini no ha querido dar la espalda al juicio y lo afronta para llevar la cuestión de la inmigración al centro del debate y de la disputa política con el centro-izquierda, por considerar que es un asunto que le favorece ante la opinión pública.

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Matteo Salvini ha destacado en el pleno del Senado que ha elegido ser procesado, mostrando confianza en la magistratura: «He defendido los confines de Italia, no he robado». Interviniendo antes del voto, Salvini apeló al juicio del pueblo y criticó la debilidad del gobierno: «Hagamos que decida un juez, salgamos del aula. El rey está nudo: Podéis continuar algún mes o semana más, pero en democracia el juicio lo da el pueblo», dijo Salvini. Después el líder de la Liga se defendió de las acusaciones y se mostró como víctima de una agresión política: «No puedo aguantar el pasar por un criminal, hay un límite a todo. Suceda lo que suceda, los números son evidentes y hay una mayoría de Pd (Partido Democrático), IV (Italia Viva) y Movimiento 5 Estrellas que considera que yo debo ser procesado. Doy las gracias a los senadores de la Liga. Nosotros no cambiamos, vamos de frente, afrontamos esta agresión política. Estoy convencido que el final será el archivo de la causa. Quien vota hoy pensando en vencer, será derrotado por la historia», concluyó Matteo Salvini.

Ahora la pelota pasa al fiscal de Catania, Carmelo Zuccaro. En el Tribunal de Catania se abrirá una fase nueva. No cabe descartar que se archive el caso y no haya proceso contra Salvini.