Ciento de niños extranjeros, algunos de tan sólo seis años, entran todos los años al Reino Unido para ser utilizados como «esclavos laborales» en fábricas y hogares, según una investigación publicada ayer por The Sunday Telegraph.

Los menores son transportados desde distintos puntos de Africa, Asia y Europa del Este por grupos de traficantes organizados y despiadados. Las víctimas entran al Reino Unido con pasaportes falsos o con adultos que se hacen pasar por familiares.

Los niños son puestos a trabajar inmediatamente, viven en unas terribles condiciones y son víctimas de abusos físicos y sexuales.Según las investigaciones policiales estas redes operan en Londres, Liverpool, Manchester y Newcastle.

Menores procedentes de China, Vietnam y Malasia, introducidos en el Reino Unido por estas mafias, han sido localizados en cocinas de restaurantes y en factorías ilegales de cannabis, mientras que otros de origen africano son situados en el servicio doméstico.Las redes de esclavización de menores procedentes de Europa del Este los utilizan para pedir limosna o robar, según las denuncias presentadas por distintas organizaciones no gubernamentales como Save the Children.

La policía ha puesto ya en marcha una serie de operaciones contra estas redes y ha identificado, entre otras, a una niña de 10 años – natural de Ghana – y otra de 11 – procedente de Nigeria – utilizadas como «esclavas» en el servicio doméstico en un barrio de Londres; así como una niña vietnamita de 13 años obligada a ejercer la prostitución.

«Resulta difícil creer que haya niños esclavos en el Reino Unido del siglo XXI», reconoció a The Sunday Telegraph un investigador de Scotland Yard. «Pero estamos decididos a poner fin a esta práctica atroz».