Salvamento Marítimo ha rescatado durante la madrugada del martes al miércoles a una patera que se encontraba a 13 millas del sur de la isla de Gran Canaria. La embarcación venía ocupada por 33 inmigrantes todos ellos subsaharianos que suman ya al registro anual la cantidad de 323 indocumentados llegados irregularmente a las costas canarias en las dos semanas que va de año.

Del grupo que venía, 15 eran varones, 13 eran mujeres tres de ellas embarazadas, cuatro eran menores de edad y un bebé de varios meses que no llegaba al año. Según informaciones del servicio de emergencias del 1-1-2, una vez Salvamento Marítimo socorrió al grupo y lo remolcó hasta el Puerto de Arguineguín, en el municipio de Mogán, el personal sanitario allí presente evacuó a las embarazadas y al bebé al Hospital Universitario Materno Infantil de Canarias.

Se trata de la décima patera que llega a Canarias este año, la cuarta a Gran Canaria. Ante este problema que está causando gran alarma en las islas, el presidente del Gobierno autonómico se ha visto obligado a reunirse con el ministro de Interior, Grande-Marlaska, para cerrar una serie de medidas para reducir esta nueva oleada de migración en el archipiélago.

Ante ello, y por el colapso de los centros de acogida que tenían las islas, en Fuerteventura se ha tenido que acondicionar momentáneamente un museo que funciona como centro de interpretación de las ermitas para acoger a los inmigrantes que deambulaban por las calles de Puerto del Rosario. La Cruz Roja se ha encargado de ello y de dar cobijo a las más de cien personas que han arribado a la isla en este 2020.