Declaran culpable al acusado de matar en un pub de Madrid a un menor angoleño

Un jurado popular considera que el ex vigilante apuñaló por sorpresa al joven en el Polígono Costa Polvoranca

El Correo, 03-06-2006

Un jurado popular de la Audiencia Provincial de Madrid declaró ayer a José David Fuertes culpable del asesinato del angoleño Ndombele Augusto Domingos, de 16 años, en la repetición del juicio que se ha celebrado por los hechos ocurridos junto al pub ‘Inn’ del Polígono Costa Polvoranca en el año 2002. El jurado, compuesto por cinco mujeres y cuatro hombres, emitió un veredicto de culpabilidad – ocho votos contra uno – al estimar que el vigilante de seguridad es autor de un delito de asesinato, ya que «asestó las puñaladas sin mediar palabra, de forma sorpresiva e inesperada ante lo que la víctima no tuvo la oportunidad de defenderse».

Tras hacerse público el veredicto de culpabilidad de Fuertes, quien se sentaba de nuevo en el banquillo después de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y el Tribunal Supremo ordenaran repetir el juicio que se celebró en 2002 en el que fue absuelto del asesinato del menor, la madre de la víctima increpó al acusado, que sólo agachó la cabeza al escuchar el veredicto.

Según el jurado, que desestimó el indulto solicitado por el acusado, el 20 de julio de 2002 se inició de madrugada una discusión en el citado polígono entre Pablo G.S., acompañado de María del Mar C., Jesús María V. y Ndombele. Pablo se fue a buscar ayuda a la puerta del pub ‘Inn’ y volvió acompañado de Fuertes, que, después de que Pablo arrojase una botella a Ndombele, le agredió «de forma sorpresiva e inesperada», causándole su muerte, concluye el veredicto. El jurado, sin embargo, no considera probado que el asesinato tuviera una motivación racista.

Después de hacerse público el veredicto, la fiscal pidió 18 años de cárcel para Fuertes, modificando así su petición inicial de 13 años al considerar el jurado que se trata de un delito de asesinato y no de homicidio. El letrado de la acusación particular rebajó su petición de 20 a 18 años, ya que, según explicó a la salida del juicio, no está probada la agravante de racismo. Tanto la fiscal como la acusación particular solicitaron indemnizar con 120.000 euros a la familia de la víctima.

«Mi hijo va a descansar»

Por su parte, la defensa de Fuertes reclamó la pena en grado mínimo y que de la responsabilidad civil subsidiaria se haga cargo la empresa propietaria del pub en el que trabajaba el acusado, extremo este último que desmintió el abogado representante de los dueños del pub, según recogió Efe.

A la salida del juicio, los padres y una hermana de la víctima, Filomeno Wzama, Paulina Kikawanakio y Magdalena, manifestaron su satisfacción por el veredicto de culpabilidad, pero añadieron que «lo más importante ahora es que cumpla la condena». «No voy a ver la cara de ese asesino más y mi hijo va a descansar», afirmó Paulina. La madre de Ndombele señaló que la familia no olvidará «jamás», mientras que su hija dijo que «tenía claro que si no existía esta justicia, existía la otra, la justicia divina, y por esa tenemos que pasar todos».

Por su parte, el presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, consideró que con el veredicto de ayer «se hace justicia y se repara el daño del anterior», aunque recordó que aún queda «mucho camino por recorrer».

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