No, los europeos no son todos iguales. Aunque compartan muchos valores en común, como la creencia en el Estado de Bienestar, en los partidos políticos pese a que piensen que en general “van a lo suyo”, estimen que la corrupción está muy extendida, en que los medios de comunicación tradicionales son los que proporcionan información fiable y que pertenecer a la Unión Europea es positivo, los españoles destacan por ser los que más partidarios en acoger a refugiados, algo que consideran un “deber moral” y en permitir la libre entrada de inmigrantes sin establecer cuotas, eso sí, proceso vinculado a la disposición de puestos de trabajo.

Así lo indica un extenso trabajo realizado por la Fundación BBVA, “Estudio Europeo de Valores 2019”, elaborado en cinco países: Alemania, Reino Unido, Francia Italia y España, que tiene como objetivo evaluar las actitudes de la población adulta para identificar lo que tienen en común y sus diferencias, entendiendo que esos valores funcionan como una especie de GPS que dirige las vidas de la población y los países.

Los españoles son más de izquierdas, en general, que el resto de las poblaciones estudiadasy les interesa mucho más las cuestiones internacionales, económicas, la ciencia, la medicina y la salud que la política

Así, el estudio pone de manifiesto que aunque son muchos los valores compartidos, hay diferencias notables entre ellos. Por ejemplo, los españoles son más de izquierdas, en general, que el resto de las poblaciones estudiadas, les interesa mucho más las cuestiones internacionales, económicas, la ciencia, la medicina y la salud por encima de la política (de hecho, el porcentaje que dice interesarle cero es el más alto, junto al Reino Unido), y son poco dados al asociacionismo y a la implicación en la esfera pública (más en Francia, Reino Unido y Alemania, donde se leen más periódicos).

Los españoles ponen muchos peros al funcionamiento de la democracia actual (Alemania se muestra más conforme con su funcionamiento, Reino Unido, poco) y el 67% cree que son necesarios los partidos políticos, aunque más de la mitad considera que los tradicionales ya no valen (porcentaje superior al 60% en Francia, Italia y Reino Unido.Las críticas a los políticos está extendida: creen que van a lo suyo (82%). Son los profesionales, junto a banqueros y sacerdotes, que menos confianza proporcionan.

Creen que el Estado debe garantizar el bienestar de los ciudadanos, especialmente en lo relativo a la salud y a las pensiones

Los españoles creen mayoritariamente que el Estado debe garantizar el bienestar de los ciudadanos, sobre todo en lo que se refiere a la salud y las pensiones. Pero muestran dudas de que controle los precios, los salarios o los beneficios de las empresas. Y son los europeos que apuestan por un equilibrio de los salarios independientemente de la formación del ciudadano.

El estudio revela que los españoles no confían especialmente en los otros (alemanes e ingleses, mucho más), no tienen especial confianza en las instituciones (salvo en la Universidad) y creen que el mayor desafío global al que se enfrentan es al cambio climático, seguido del terrorismo, ciberataques y la inmigración. Respecto a la primera cuestión, la población española son los que creen que aún hay tiempo para revertir los efectos del cambio climático, un fenómeno que tienen claro ha ocasionado el propio ser humano.

En cuanto a la inmigración son, junto a los británicos, los más favorables (49%) a la entrada libre de inmigrantes siempre que haya trabajo, mientras que en los demás países la mayoría se decanta por establecer cupos anuales o incluso, impedir la llegada de personas que buscan una oportunidad (18% en Italia).