La Casa Blanca ha confirmado que está estudiando posibles «opciones» para trasladar a los inmigrantes en situación irregular que detiene en la frontera a las llamadas «ciudades santuario» de EEUU, ante la insistencia del presidente, Donald Trump, en una idea que su equipo ya descartó.

La Casa Blanca ha confirmado lo que Donald Trump ya adelantó el viernes, con su campaña para la reelección en 2020 en marcha y su intención de endurecer su política migratoria ante la necesidad de que parezca que está haciendo todo lo posible para reducir la inmigración.

El mandatario señaló que está considerando «en serio» enviar a los inmigrantes en situación irregular detenidos por las autoridaes migratorias únicamente a las llamadas «ciudades santuario», en general en manos demócratas.

«Esta es una opción sobre la mesa», ha asegurado la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, en declaraciones a la cadena de televisión ABC News.Las «ciudades santuario» son jurisdicciones locales que no destinan recursos a perseguir a inmigrantes y se niegan a informar a las autoridades federales del estatus migratorio de las personas detenidas.

«(Esta idea) fue planteada a nivel de personal (del Gobierno), y se determinó en ese momento que, logísticamente, había muchos retos y probablemente no tenía sentido seguir adelante, y la idea no avanzó más», ha reconocido Sanders.Pero Trump «escuchó la idea y le gusta, y estamos viendo si hay opciones que lo hagan posible, y haciendo una revisión completa y exhaustiva» de la idea, ha añadido.

La portavoz no ha querido pronunciarse sobre la legalidad de la medida, que según varios informes de prensa ha sido cuestionada por los propios abogados del Departamento de Seguridad Nacional.

«Que se ocupen ellos»

Trump defendió en un tuit a última hora del sábado que «Estados Unidos tiene el derecho legal absoluto de transferir a las ciudades santuario a los inmigrantes indocumentados» que detiene. «¡Por la presente, exigimos que se ocupen de ellos al más alto nivel, especialmente en el estado de California, conocido por su mala gestión y sus altos impuestos!», exclamó Trump.

En su mensaje, resaltó que «la izquierda radical siempre parece querer una política de fronteras abiertas y brazos abiertos, así que esto debería hacerle muy feliz».El mandatario ha criticado duramente desde que llegó al poder a las jurisdicciones «santuario» de EEUU, unas 200 ciudades y condados, entre los que figuran Nueva York, Chicago y San Francisco, además del estado de California.Su nueva propuesta pretende enviar un mensaje a los demócratas que gobiernan esas localidades, pero los analistas creen que podría tener un efecto contraproducente para Trump, al hacer que los «sin papeles» estén más protegidos contra la deportación que en otras ciudades que sí cooperan con las agencias federales.

Alcaldes de «ciudades santuario» criticaron el «abuso de poder indignante» de Trump por «utilizar a los seres humanos para resolver" los asuntos político».

El alcalde de Filadelfia, Jim Kenney, ha respondido en un comunicado que «si bien la propuesta del Gobierno de Trump muestra su desdén por la dignidad humana básica, la ciudad estará preparada para recibir a estos inmigrantes tal como hemos acogido a nuestras comunidades migrantes durante décadas», según Reuters.