DONOSTIA – Los hijos de inmigrantes que residen en Euskadi están mayoritariamente escolarizados en los modelos lingüísticos con mayor presencia de euskera, en especial los que cursan Primaria, que optan por los centros públicos y los modelos D y B, mientras que en Secundaria se observa una preferencia más alta por el modelo A y también por los centros concertados. Esta es una de las conclusiones del análisis realizado por Ikuspegi sobre la realidad escolar de los niños y jóvenes de origen extranjero, las llamadas segundas generaciones. Estos jóvenes recuerda el documento de Ikuspegi “se enfrentan a situaciones propias de su condición como la necesidad de crear una nueva identidad y, en definitiva, encontrar su sitio en una realidad vasca diversa”.

En el último informe divulgado por el Observatorio vasco de la Inmigración dedicado a las segundas generaciones, Iraide Fernández, Julia Shershneva y Maite Fouassier abordan la diversidad en las aulas y analizan las variables que definen a niños y adolescentes de entre 6 y 16 años cuyos padres son extranjeros. Las autoras concluyen que “la comparativa de resultados entre el alumnado de ascendencia extranjera y autóctona nos ha permitido comprobar que, en efecto, existen diferencias significativas entre ambos grupos”. “Los resultados dice el texto confirman algunas cuestiones que ya apuntábamos en otros informes de esta misma serie y que, a menudo, aparecen en otras investigaciones de este ámbito. Existe una brecha entre las familias de origen extranjero y autóctono, fundamentalmente basada en variables educativas y económicas, que influye en el devenir de los y las descendientes”.

Tras señalar que el 52% de los alumnos de Primaria (de 6 a 11 años) de origen inmigrante están escolarizados en el modelo D, el 37% en el B, y solo un 4,1% cursa en el A, se señala que en Primaria, la opción mayoritaria es la de un centro público, mientras que en Secundaria el alumnado se reparte de manera similar entre público y concertado. “Esta diferencia entre Primaria y Secundaria y el tipo de centro predominante señala el informe de Ikuspegi puede tener mucho que ver con el modelo lingüístico: los centros concertados son los que habitualmente ofertan plazas en modelo A y modelo B, por lo que pueden ser una opción interesante, en mayor medida, para las personas de Secundaria que muestran una mayor preferencia por este modelo”. De hecho, el 20,2% de los alumnos de Secundaria de familias no autóctonas eligen el modelo A, el 36,1% el B y el 43,7% el D.
Tema de debate Ikuspegi, que lleva tiempo estudiando diversas variables de las segundas generaciones, reconoce que “la concentración de alumnado de ascendencia y origen extranjero en las aulas se ha convertido en una cuestión de debate público”. “Sin embargo explica el informe, sus protagonistas (el alumnado) no parece considerarlo un tema conflictivo. El alumnado de ascendencia extranjera de Primaria percibe la diversidad cultural en su aula, aunque tal apreciación se hace menos patente entre quienes estudian en centros educativos de la red concertada. Para el caso de Secundaria, el alumnado adquiere una postura tolerante ante la diversidad cultural, y no percibe que exista una excesiva presencia de inmigración en su centro escolar, aunque es más probable que esto ocurra entre quienes estudian en modelo A. Asimismo, el alumnado de ascendencia extranjera muestra satisfacción con su centro educativo y sus relaciones en el aula y, aunque existen confrontaciones, no son frecuentes”.

INSULTOSEn concreto, en Primaria a un 17,1% de los hijos de inmigrantes le han insultado en el colegio y al 10,6% exclusivamente por ser diferente;un 15,4% afirma que le han pegado y el 16,4% de las y los niños sienten que no quieren jugar con ellos. En el caso de Secundaria, las respuestas sobre incidentes presentan unos porcentajes superiores a los obtenidos en Primaria: un 22,3% afirma haber sido insultado, que sumado a un 22,7% que lo es debido a ser diferente, aparece como la principal razón sufrida en el centro escolar;percibir que no quieren jugar con ellos asciende al 16,9%, mientras que la violencia física es de un 10,5%.

Ikuspegi puntualiza que nueve de cada diez alumnos de Primaria con padres extranjeros y cinco de cada diez de Secundaria han nacido en el Estado español. No obstante, debido a sus orígenes “se encuentran en una situación de liminalidad, es decir, aquella situación en la que las personas oscilan entre distintos contextos culturales y, finalmente, adoptan ciertos rasgos culturales de distintas procedencias conformando una nueva identidad”. Así, “al preguntar con la identificación nacional como forma de definir dicha identidad, los datos nos muestran dicha complejidad: entre el alumnado de ascendencia extranjera de Primaria, la gran mayoría se identifica como vasco o español;sin embargo, en el caso de Secundaria, aproximadamente la mitad define su pertenencia por el país de origen de sus progenitores, aunque entre el alumnado de ascendencia africana la incidencia de aquellos/as que se identifican como vascos es mayor”.

Por otro lado, al preguntar al alumnado de Secundaria por su integración, “el grado de integración percibida en la sociedad vasca es más elevado en el caso del alumnado de ascendencia europea del este y asiática, siendo los procedentes de Latinoamérica y África los menos integrados”.

LA CIFRA

90%

Ikuspegi ha analizado el alumnado de ascendencia extranjera: un 69% vive en Bizkaia, un 13,5% en Gipuzkoa y un 17,5% en Araba;un 44,1% son niñas ;la gran mayoría afirma que utiliza el castellano (98,2%) y el euskera (90,5%) para comunicarse.